Si algo molesta a Ignacio Galán, presidente de Iberdrola, es que salga a relucir su familia o su vida privada. Por eso, se ha cabreado ligeramente con el artículo en el diario madrileño El Mundo en el que se hablaba sobre su vida privada. Y los más malvados sospechan que el inductor del artículo fue el presidente de Endesa, su gran competidor, don Borja Prado Eulate, hombre incluyente en el grupo Unidad Editorial.

El asunto no ha podido suceder en momento más inoportuno, porque según fuentes gubernamentales, las negociaciones para renovar el parque nuclear español, al menos por otros 10 años, van por buen camino.

Ojo, los que negocian son el Gobierno del PP y el PNV. Sí, dentro de esa mega-negociación entre el PP y el PNV por cinco votos necesarios para los Presupuestos 2018. 

El PNV habla en nombre de la Iberdrola de Ignacio Galán, mientras la Endesa de Borja Prado defiende al Gobierno, con un discurso en la última Junta General en que Prado obtuvo la indulgente sonrisa (y esto es mucho decir) del titular de Energía, Álvaro Nadal. Eso de que el presidente de una eléctrica se niegue a que suba el precio de la luz y de que haya facilidades para la renovación del parque nuclear no sucede todos los días.

Por cierto, ¿quién escribió el artículo de El Mundo sobre Galán? En Iberdrola sospechan que Borja Prado

El caso es que las nucleares son necesarias pero el PNV pide en nombre de “su” compañía, Iberdrola, que se le dé a Galán alguna salida. Mejor remuneración por reducción impositiva, por ejemplo.

Y jurídicamente no es sencillo reformar la reforma Soria pero puede hacerse. Y cuando PP y PNV, Iberdrola y Endesa, lleguen a un acuerdo, que ya urge, Galán podrá pedir la renovación de Almaraz, la primera que toca, mientras los políticos intentarán convencer a Ciudadanos y a PSOE, que en sus timones energéticos mantienen a dos talibanas de la cosa antinuclear y ecoverdes, dos damas anti-plutonio: Melisa Rodríguez y Cristina Narbona.

Pero recuerden: estos son mis principios, pero si no le gustan tengo otros. Incluso principios pro-nucleares, que mejor Fukushima que decirle a Juan Español que le tiene que subir el precio de la luz.

Y Prado Eulate: deja en paz la prensa.