La empresa pública Adif Alta Velocidad (Adif AV), que al igual que su matriz, Adif, está presidida por Ángel Contreras, ha desmontado la recurrente queja de los franceses de Ouigo y de los hispanoitalianos de Iryo sobre los elevados cánones que le pagan. Y es que estos llevan congelados desde 2021,... pero cada vez hay más pasajeros y trenes, y además, los rivales del AVE de Renfe (y de su versión low cost, el Avlo) compiten cada vez en más rutas.

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El gestor público de la infraestructura ferroviaria de alta velocidad ha ingresado más tanto por el uso de vías (+20%) como por el de las estaciones (+20%, según los resultados del primer trimestre a los que ha accedido Europa Press. En concreto, 167 millones de ingresos por el uso de vías y 32 millones por el de estaciones, dando lugar a unos ingresos totales de casi 200 millones, un 20% superiores a los de hace un año.

Adif AV también ha tenido que afrontar un mayor coste de mantenimiento de la red (+14%) por reparaciones, mantenimientos y extensiones de la red

Por su parte, el resultado operativo se ha duplicado, alcanzando los 29,5 millones. Adif AV ha logrado reducir sus pérdidas un 4%, a 48,4 millones, al beneficiarse de la caída del gasto en energía (-40%, a 71 millones), aunque al mismo tiempo ha tenido que afrontar un mayor coste de mantenimiento de la red (+14%, por reparaciones, mantenimientos y extensiones de la red) y un impacto negativo de la financiación debido al aumento de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE). De hecho, los costes financieros se han disparado un 30%, a 108 millones. Por su parte, la deuda ha descendido un 8%, a 18.705 millones.

Recuerden que Ouigo se queja recurrentemente de los elevados cánones que paga a Adif, aunque ahora su prioridad es seguir retando al ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, con mayores descuentos que los de Renfe, después de que este anunciara que prepara una denuncia contra Ouigo ante Bruselas por competencia desleal al vender billetes a pérdidas ofreciendo elevados descuentos. Desde el tren hispanoitaliano Iryo también se quejan de los cánones y tampoco han logrado aún ser rentables, aunque no apuestan tanto por el low cost como los franceses.