Airbus y Boeing han presentado turbulencias en el primer semestre. Mientras, el gigante aeronáutico europeo ha ganado un 15% menos, el estadounidense ha vuelto a pérdidas millonarias. Ninguno de los dos ha obtenido premio bursátil a sus cifras.
Eso sí, las turbulencias de ambos tienen notables diferencias. Airbus ha tenido un beneficio neto de 1.901 millones de euros hasta junio, lo que supone un 15% menos que hace un año, a pesar de que entre enero y marzo le fue bien, y el resultado neto de explotación (Ebit) ajustado ha sido de 2.645 millones (-2%), pese a la mayor aportación del negocio de aviones comerciales (2.478 millones, un 4% más) y en gran parte por las pérdidas operativas de 113 millones de la división de Defensa y Espacio (-113 millones). Por su parte, los ingresos se han elevado ligeramente, hasta 24.810 millones (+1%), siendo los de aviones comerciales los más altos (17.533 millones, un 2% menos, pese a 297 entregas), por encima de los de las divisiones de Defensa y Espacio (5.056 millones, un 11% más) y de Helicópteros (2.744 millones, un 6% más). Y el flujo de caja libre del gigante aeronáutico que dirige Guillaume Faury se ha disparado un 18%, a 1.646 millones, y la posición de tesorería neta ha alcanzado los 7.214 millones (+7%).
Boeing ha tenido turbulencias más notables que su rival, al volver a pérdidas hasta junio y que estas ascendieran a 1.066 millones, por el tropiezo registrado entre abril y junio (-72%). Es cierto que ya tuvo números rojos en el primer trimestre, pero es que en los seis primeros meses de 2021 ganó 5,9 millones. Por su parte, los ingresos han descendido un 5%, a 30.233 millones, de los que la división de Defensa, espacio y seguridad aportó 11.505 millones (-17%) por los cargos en los programas de desarrollo a precio fijo -incluidos el MQ-25 y Commercial Crew-; y aviones comerciales, 10.229 millones gracias a un 38% más de entregas (216 en total). Eso sí, su presidente y CEO, David Calhoun, ha destacado que fueron capaces de generar un flujo de caja operativo positivo en el segundo trimestre, aunque en el semestre fue negativo de 3.089 millones, y la deuda total se ha situado en 56.371 millones.