Parece que Amazon sigue empeñada en hundir al pequeño comercio, porque ahora abrirá tiendas físicas que funcionarán como unos grandes almacenes, en los estados de Ohio y California (EEUU), según adelanta The Wall Street Journal. Y ojo, este movimiento llega después de que haya lanzado librerías y supermercados físicos, y de que esté sacando una fuerte tajada del auge del comercio electrónico que ha impulsado la pandemia.
Estos nuevos espacios tendrían una superficie de unos 3.000 metros cuadrados, siendo inferiores a la mayoría de grandes almacenes que conocemos ahora, que ocupan unos 10.000. Con este paso, Amazon quiere aumentar las ventas de ropa, artículos para el hogar y productos electrónicos, y podría dar un lugar privilegiado a sus productos propios (en muchos de los cuales ahora compite con sus verdaderos creadores, que en un principio sólo vendía, pero al ver su éxito copió y pasó a vender también, fagocitando el comercio electrónico del que se nutre).
Todo esto llega después de que Amazon haya duplicado el beneficio semestral, pero sin llegar a la facturación esperada por los analistas. Claro que también se produce tras el relevo en la silla de CEO, que pasó a manos de Andy Jassy, aunque eso supondrá pocos cambios, y de la primera excursión espacial de Jeff Bezos. Mientras sigue precarizando el empleo en España y Bezos continúa siendo el hombre más rico del mundo, seguido del CEO de Tesla, Elon Musk.