Antolin ha anunciado un cambio en la vicepresidencia para elevar la transformación, pero se mantiene la estrategia. El fabricante de componentes para el interior del automóvil con sede en Burgos mantendrá el control 100% familiar en su capital y la gestión compartida entre el Consejo de Administración liderado por el presidente y la vicepresidenta, con la figura del CEO.
Como dice el refrán español, año nuevo, vida nueva, aunque en este caso es mucho más cierto lo primero. El próximo 1 de enero, María Helena Antolín Raybaud (57 años) cederá el cargo de vicepresidenta a su hermana Emma Antolín Granet (43 años). Se trata de un nuevo relevo dentro de la familia propietaria en una compañía que tiene más de 70 años de historia: su origen se encuentra en un taller mecánico en Burgos, especializado en reparaciones de vehículos y maquinaria agrícola, que regentaban el palentino Avelino Antolín López y sus hijos, también palentinos, Avelino y José Antolín Toledano (en la imagen). Estos dos últimos, en los años 50 del siglo XX, inventaron la rótula de dirección de caucho-metal y siguieron avanzando en la creación de nuevas compañías y en diversificarse hasta convertirse en un fabricante de componentes para el interior del automóvil denominado Grupo Antolin en 1985 e iniciar su internacionalización cuatro años después. Hoy, sólo ya como Antolin cuenta con 24.000 empleados, en 130 plantas y 27 oficinas técnico-comerciales en 25 países.
Avelino tuvo dos hijos (Ernesto y Ana Berta Antolín Arribas) con Pilar y falleció en 1995; José tuvo tres hijos (María Helena Antolín Raybaud, y Emma y José Antolín Granet) y se mantuvo en la presidencia ejecutiva del grupo automovilístico hasta 2015, cuando tras 50 años de trabajo, decidió dejar las funciones ejecutivas, pasar a presidente de honor y dar el testigo a la siguiente generación: su sobrino, Ernesto, asumió la presidencia ejecutiva y su hija mayor, María Helena, la vicepresidencia. Eso sí, ambos decidieron iniciar cierta profesionalización de la gestión con el nombramiento de un CEO en 2015: Jesús Pascual. Este fue sustituido en mayo de 2022 por el ingeniero industrial bilbaíno Ramón Sotomayor, apenas unos días antes del fallecimiento de José Antolín Toledano a los 86 años de edad. Sotomayor ha compartido la gestión con los primos Ernesto (59 años) y María Helena (57 años) con bastante buen acierto, dejando las pérdidas y volviendo a beneficio, hasta el pasado 11 de octubre, cuando con 59 años ha dado el testigo a la economista bilbaína Cristina Blanco (en la imagen superior) de 49 años, quien lleva más de 22 años trabajando en Antolin y desde 2016 estaba al frente de la dirección financiera.
En 2015, José Antolín Toledano dio el testigo a la siguiente generación: su sobrino, Ernesto, asumió la presidencia ejecutiva y su hija mayor, María Helena, la vicepresidencia. Y se nombró CEO a Jesús Pascual, al que siguió Ramón Sotomayor en mayo de 2022 y Cristina Blanco desde el pasado octubre
Ahora, casi un mes y medio después, se conoce un nuevo relevo, pero en este caso dentro de la familia fundadora y propietaria del 100% del capital. Recuerden que este lo ha mantenido durante su historia, a excepción de un lapso temporal entre 2004 y 2013 -hubo una ampliación de capital y un grupo de cinco entidades financieras españolas entró haciéndose con un 22,8% del capital, que más tarde compraron los Antolín-. El relevo se recogía en el Protocolo Familiar y a partir del próximo 1 de enero, Emma Antolín Granet asumirá la vicepresidencia de Antolin con el foco prioritario en la transformación, poniendo especial atención en el gobierno corporativo y la sostenibilidad. Esta licenciada en Psicología y con un Máster en Financial Management ya formaba parte del Consejo de Administración y de varias de sus comisiones, tiene más de 14 años de experiencia en la compañía, y lo compaginaba con su dedicación académica en diversas escuelas de negocio y con la presidencia ejecutiva de Injat Investment Office, el family office de su rama familiar.
“Asumo la Vicepresidencia de Antolin con la ambición de preservar y proyectar al futuro el legado recibido y seguir contribuyendo a reforzar nuestro liderazgo en la industria de componentes del automóvil”, ha señalado Emma Antolín. “Tras más de setenta años de historia, aspiramos a consolidarnos como un referente de innovación permanente, de apuesta por la calidad y la excelencia, de talento de nuestros equipos y de un firme compromiso con la sostenibilidad”, ha añadido, y ha mostrado su agradecimiento a su hermana María Helena (en la imagen superior). Esta última, nadida en Toulon (Francia) y licenciada en Negocios Internacionales y Administración de Empresas y con Máster en Administración de Empresas, ha afirmado que está “muy orgullosa de haber sido parte de la transformación de la compañía y haber ayudado a su crecimiento hasta convertirla en uno de los grandes referentes en el sector. Ha sido un proyecto apasionante y, tal y como he hecho en los últimos 30 años, siempre estaré al servicio de esta compañía a la que espero seguir ayudando desde mis nuevas responsabilidades en el futuro, tal y como he trasladado a Ernesto Antolín y Emma Antolín”. Y es que seguirá unida al grupo a través de su participación en distintos órganos de decisión de la familia. Asimismo cabe destacar que es consejera independiente de Iberdrola desde finales de marzo de 2010, tras haberlo sido de la filial Iberdrola Renovables; también ha presidido Sernauto (la asociación que agrupa a los proveedores españoles de automoción) entre los años 2015 y 2021, ha estado presente en la junta directiva del Instituto de la Empresa Familiar (IEF) -a la que entró su primo Ernesto en mayo del año pasado- y ha sido miembro del Consejo Consultivo de SabadellUrquijo Banca Privada.