Francisco José Marco Orenes se jubiló el 31 de diciembre y cobró 7,1 millones de euros, que no está nada mal. El grueso de la remuneración, 5 millones, fue el plan de pensiones acumulado, mientras que la remuneración en metálico fue de 1,9 millones. Además, percibió 17.000 euros en otros conceptos.
Ahora bien, Marco Orenes dejó de ser consejero ejecutivo, pero continúa en Mapfre como consejero dominical. En otras palabras, cobró la jubilación pero seguirá cobrando como consejero.
Antonio Huertas, por su parte, cobró 2,37 millones de euros, un 4,3% más que en 2020. El presidente de Mapfre tiene un sistema de ahorro con derechos económicos consolidados de 5,7 millones, según el informe de remuneraciones remitido este jueves a la CNMV.
Los otros tres consejeros ejecutivos también ganaron más de un millón de euros: Ignacio Baeza, 1,7 millones; José Manuel Inchausti, 1,1 millones y Fernando Mata, poco más de un millón.
Alguno pensará que no son unas retribuciones excesivamente elevadas para ser una empresa del Ibex y la mayor aseguradora de España, pero lo cierto es que el 10% de los accionistas votó en contra de las retribuciones de 2020, que fueron más bajas. Son muchos accionistas, si tenemos en cuenta que el 67,7% del capital está en manos de Fundación Mapfre.
La retribución media de los empleados fue de 45.000 euros, un 4,65% superior a la de 2020. Muchos no olvidarán el año pandémico, en el que el sueldo medio bajó un 4,44%, hasta 43.000 euros.