No ha sido un buen ejercicio para Apple -su año fiscal va de octubre a septiembre- porque la facturación cayó un 2,8% y el beneficio también cayó un 2,8%, y eso no sucedía desde 2019. La cotización, sin embargo, siguió a lo suyo y en los últimos doce meses los títulos se han revalorizado un 27,8%, hasta los actuales 177,57 dólares la acción.

El ejercicio se puede resumir así: vendió menos ‘cacharros’ e ingresó más por los servicios, aunque no lo suficiente para compensar lo primero. Hablamos de una caída del 2,4% en la venta de Iphone (alcanzaron los 200,583 millones de dólares), a pesar del récord de ventas del último trimestre, (+2,7% hasta 43.805 millones de dólares), de un 26,9% menos en el caso de Mac (29.357 millones de dólares) y de un retroceso del 3,4% en el caso de Ipad (hasta los 28.300 millones).

Lo único que aumentó fue la facturación de servicios, que lo hizo un 9% hasta los 85.200 millones de dólares, más que las ventas de Mac y Ipad juntos, pero muy lejos todavía de las ventas de Iphone, que sigue siendo la estrella de la multinacional, lo que no deja de llamar la atención por su elevado precio.

El único mercado donde Apple mejoró las ventas fue Asia-Pacífico y sólo fue un 0,8%. En todos los demás bajaron y en algunos de manera significativa. Por ejemplo, en Japón, donde disminuyeron un 6,6%. En América, cayeron un 4,2%, en Europa un 3% y en China un 2,2%.