Analizamos en Hispanidad a principios de mes los resultados económicos de ArcelorMittal en 2023, año en el que ha desplomado su beneficio más de un 90%, ganando 919 millones de dólares (852,17 millones de euros).
Por lo que los Mittal tienen la excusa perfecta para extender el síndrome de Nowa Huta. Recuerden que al presidente ejecutivo del gigante siderúrgico mundial, Lakshmi N. Mittal, se le puede conocer por ser un gran despedidor, pues en la citada ciudad polaca que se levantó junto a Cracovia (siguiendo el modelo soviético y siendo un reconocido experimento de ingeniería socialista) compró la acerera cuando cayó el comunismo y redujo la plantilla de 40.000 trabajadores a 10.000.
La compañía anunció hace unos meses que despedirá a 3.500 empleados en Sudáfrica, país en el que quiere continuar con la estela marcada en España, donde llevan arrastrando un ERTE desde hace dos años, en el que quieren incluir a más de 8.000 trabajadores.
Todo bajo el paraguas de la descarbonización y los malos resultados, pero mire usted por donde, hoy jueves la compañía ha enviado el informe de retribuciones remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). ¿Adivinan? Lakshmi N. Mittal pasa a cobrar 1,536 millones de dólares, cuando en 2022 percibió 1,529 millones de dólares. Su hijo Aditya Mittal también se sube el salario de 1,670 millones a 1,678, y su hija, Vanisha Mittal Bhatia para de 169.000 dólares a 175.000.
No es mucha subida, pero en un contexto en el que anuncias despidos, desplome del beneficio y precarización del empleo, llama la atención. ¿Y quién es la única que les ha plantado cara ante los continuos despidos? Meloni, en Italia se ha optado por una nacionalización temporal de su principal siderúrgica para no precarizar más ni su actividad ni su empleo.
Porque recordemos que en España, Sánchez se citó en Davos con el presidente de AcelorMittal Lakshmi N. Mittal, ojo, no para abroncarle por su actitud y actuación en el país, sino para darle 450 millones de euros en ayudas públicas para descarbonizar sus plantas en Asturias. ¿Y cómo respondió la acerera? Con los citados despidos e impulsando en Francia la misma planta que tenía para Asturias... por el precio de la luz y las nuevas ayudas públicas galas.
Y por si no había quedado claro el plan, este miércoles la secretaria de Estado de Industria, Rebeca Torró, se ha reunido con la consejera de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico del Principado, Nieves Roqueñí, y le ha prometido que el Ministerio de Industria mantendrá la asignación de 450 millones de euros para la descarbonización de sus factorias astuarianas de Gijón y Avilés, que generan 5.000 empleos directos y otros tantos indirectos.