Schindler se lleva premio bursátil este jueves (su cotización sube algo más de un 3%) tras ganar un 44% más hasta septiembre. Eso sí, sigue sin remontar en nuevos pedidos.

El fabricante suizo de ascensores, escaleras mecánicas y puertas automáticas ha disparado su beneficio neto un 43,7%, hasta 729,3 millones de euros, y su beneficio operativo un 44%, a 941,5 millones. Por su parte, los ingresos han ascendido a 9.006 millones (+2,7%) por la sólida ejecución de pedidos pendientes, pese al freno en China en el tercer trimestre con su ralentización de la construcción.

 

En los nueve primeros meses, los nuevos pedidos han bajado un 4,1%, a 9.071 millones, situándose por debajo del valor de los encargos pendientes (9.838 millones) que tienen sus 70.296 trabajadores. La bajada del 4,1% supone un ligero descenso respecto al dato del primer semestre (-4,6%), algo en lo que ha contribuido el tercer trimestre, cuando la entrada de pedidos se redujo un 3%.

El presidente y CEO de Schindler, Silvio Napoli, ha subrayado que mantienen el compromiso de “crecer de forma sostenible y rentable”. Todo ello, pese a “las duras condiciones del mercado y de la intensificación del impacto de los tipos de cambio”, ha añadido.