El mercado está barato y las propias compañías cotizadas aprovechan para impulsar los precios de sus acciones o, intentarlo al menos.
Lo que dice concretamente Bolsas y Mercados Españoles, (BME) es que las empresas que conforman el índice Ibex 35 amortizaron acciones por valor de 7.590 millones de euros entre enero y junio, lo que supone un alza del 6,6% respecto al mismo periodo del año anterior.
Además, y también según BME, el nivel de autocartera se elevó hasta el 1,69% del capital total del conjunto de las 35 del selectivo. Esto supone un incremento de más de seis décimas en comparación con el 1,03% que registraba a final de año.
Este incremento se debe, sobre todo, a las recompras realizadas por BBVA, Santander, CaixaBank y Sabadell, que han desembolsado entre enero y junio cerca de 7.170 millones de euros.
BME señala que el sector financiero "encabeza los anuncios de las grandes cotizadas respecto a futuros planes de amortización de acciones". El año pasado, los bancos acumularon el 46,6% de los 12.759 millones de euros amortizados por todas las empresas del Ibex 35. Por detrás, el sector de petróleo y energía 30,2%.
Y el oro que sigue tocando máximos. Algunos expertos lo sitúan en los 4.000 dólares
Al calor de las subidas de tipos, de las compras de los bancos centrales, y de la fuerte demanda como valor refugio por las guerras en Oriente Medio y Ucrania, el oro repunta y saca brillo.
Así que, a medida que el dólar cae, el metal precioso escala posiciones y se coloca en los 2.572,98 dólares por onza lo que supone incremento semanal del 3%.
Supera así el nivel alcanzado el pasado 20 de agosto cuando se situó en los 2.531,75 dólares.
Algunos expertos no descartan precios cercanos a los 4.000 dólares a finales de 2025, un 60%.
Más modesto es Bank of America que pronostica que el precio de la onza de oro podría alcanzar los 3.000 dólares en un año o año y medio.
La Agencia Internacional de la Energía (AIE) avisa de una desaceleración “drástica” en la demanda de petróleo
La demanda avanza al ritmo más lento desde la crisis sanitaria. En su informe de septiembre precisa que el consumo global ha aumentado en 800.000 barriles diarios en el primer semestre del año, la tasa más baja desde que la demanda de crudo se desplomó durante la pandemia.
Y volvemos a China para buscar culpables donde el consumo se contrajo por cuarto mes consecutivo en julio, en 280.000 barriles al día.
Así que, “cuando la música deja de sonar”…frase con la que comienza la AIE su informe…tendremos que dejar de bailar porque, sentencia la Agencia: “habrá excedente de crudo aunque los recortes de la OPEP permanezcan en el tiempo”.