Los bancos españoles no confían en que Christine Lagarde vaya a subir los tipos de interés durante 2020, su primer año al frente del BCE. A priori, no debería suponer un drama para las entidades, acostumbradas a lidiar con tipos negativos y a buscar ingresos más allá del negocio típico bancario, pero lo cierto es que no es así y habrá muchos despidos y cierre de oficinas.
Y no solo las entidades. La subgobernadora del Banco de España, Margarita Delgado, tampoco confía en que Lagarde vaya a dar un giro significativo a la política monetaria de Mario Draghi, el hombre que salvó el euro y hundió (casi) todo lo demás. La número dos del supervisor dejó bien claro esta semana que la banca debía afrontar una nueva oleada de fusiones para seguir ajustando redes y plantillas.
Caixabank, que cuenta con una plantilla de 27.000 empleados, ha sido la primera en dar un paso al frente. Tras el ERE voluntario de 2.023 empleados, el jueves inició un plan de prejubilaciones voluntarias, para un máximo de 376 empleados de 58 años o más de Barcelona y Teruel, las dos regiones que no se vieron afectadas en el expediente anterior. El ajuste no es muy grande y lo más probable es que tampoco sea el último. Y a Caixabank le seguirán el resto de bancos, que buscan la rentabilidad perdida y que han encontrado en la digitalización una vía para alcanzarla.
Primer plan estratégico del Banco de España
“Se trata de que todos trabajemos para lograr ser un banco central de referencia, más dinámico y comprometido con la sociedad”, asegura Pablo Hernández de Cos en el prólogo del Plan Estratégico 2024 que el Banco de España aprobó esta semana. El plan persigue cinco objetivos:
1. Mejorar la capacidad de identificación y de reacción temprana ante los riesgos para la estabilidad financiera y económica.
2. Modernizar el Banco de España para que sea más eficiente, flexible e innovador.
3. Impulsar la excelencia a través de la gestión del talento y del compromiso con los empleados.
4. Aumentar la capacidad de influencia en nuestro ámbito de actuación.
5. Generar mayor confianza en el Banco de España y más valor para la sociedad.
El proyecto incluye 19 planes de actuación concretos que van desde la creación de un Comité de Estabilidad Financiera (CEF), hasta el impulso de la educación financiera, pasando por la racionalización de horarios y la ampliación del teletrabajo, punto este que recuerda aquel chiste de uno que llama por teléfono:
- ¿Es el Banco de España?
- Sí, dígame.
- Ustedes no trabajan por la tarde, ¿verdad?
- No: por la tarde no venimos. Cuando no trabajamos es por la mañana.
Bromas aparte, el plan marcará un antes y un después en la institución, y para que se cumpla, la dirección elaborará informes trimestrales que trasladará al consejo de gobierno.
Cuidado con las tarjetas revolving
Le ocurrió a una clienta del BBVA. Estaba pagando un interés de entre el 27,47% y el 41,71% en su tarjeta revolving, algo que el Juzgado de Primera Instancia número 1 de Benavente (Zamora) consideró “notablemente superior al normal del dinero y manifiestamente desproporcionado con las circunstancias del caso”.
La sentencia, que puede ser recurrida, condena al banco a devolver todo lo que cobró en exceso respecto al principal prestado. “Procede apreciar el carácter usurario del interés remuneratorio establecido en el contrato, lo que conlleva su nulidad”, señala el juez.
Moraleja: antes de contratar una tarjeta revolving lean bien el contrato.