Estamos en el tercer trimestre de 2024, en el mejor de los casos, la OPA del BBVA sobre el Sabadell se dilucidará en marzo de 2025. Hasta entones, la campaña del BBVA en el sentido de que los fondos están con él debe verse con mucha precaución. En primer lugar, porque los fondos, los presentes en los accionariados de BBVA y de Sabadell, que se parecen mucho, nunca están con nadie si no consigo mismos. Es verdad que les gusta más lo grande que lo pequeño, en ese sentido estarían con la fusión... pero también les gusta ganar dinero, Y oiga, una OPA con papelitos, bastante rácana, pendiente de la evolución de tipos, fiada a que la bajada del precio del dinero beneficiará más al BBVA que al Sabadell (y en esto pueden tener razón) no parecen, sin embargo opciones firmes.

En plata: que los fondos aún no han tomado una decisión.

El BCE no le ha dado ningún ultimátum a Torres: no es necesario, saben que si Torres fracasa en la OPA tendrá que marcharse

Lo único cierto es que Carlos Torres Vela, presidente del BBVA necesita ganar la OPA. De lo contrario, tendrá que presentar la dimisión. Como dicen en el propio banco: no hace falta que el BCE se lo exija ni que el Consejo se le rebele: simplemente tendrá que hacerlo porque le habrán quitado el suelo de debajo de los pies. 

Y esa opción no le gusta. Ahora mismo, la situación es esta: Carlos Torres ha prometido al Gobierno que se queda en Telefónica si le apoyan en la OPA contra el Sabadell. No es mucho, porque con eso el Gobierno ya cuenta, pero al menos da fe de sus bonísimas intenciones. 

Mientras, el presidente del Sabadell, Pep Oliu le acusa de juego sucio: no es cierto que los fondos le apoyen y no es cierto que Carlos Cuerpo haya cambiado de opinión. 

¿Y si José Luis Escrivá se convirtiese en gobernador? Hará lo que le mande Moncloa. Escrivá no es un independiente, rencoroso sí, pero independiente no.

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Pero lo más importante es lo ya dicho: el BCE no le ha dado ningún ultimátum a Torres: no es necesario, saben que si Torres fracasa en la OPA tendrá que marcharse.

¿Y Villarejo? En el BBVA dicen que no preocupa pero ocupa. ¿Seguro que otra vez no les está perdiendo la prepotencia? El BBVA pasa como persona jurídica imputada en el caso Villarejo. Ya verán a como a la Sala le dé por hacer desfilar por la Audiencia a todo el Consejo de Administración en bloque... mismamente. 

O ya verán cómo el Banco Central Europeo (BCE) exija la renovación de toda la alta dirección habida cuenta de que un banco no puede estar imputado en causa penal. 

Pero, a día de hoy, lo más importante es que el Gobierno cambie de postura y apoye al BBVA en su OPA contra el Sabadell. Carlos Cuerpo, actualmente, se muestra firme. No sólo habla de inclusión financiera sino que, además, advierte que la CNMC podría poner condiciones que hicieran indeseable la fusión. Pero conste que la CNMC es un organismo independiente.

Además, mientras no haya gobierno en Cataluña, presidido por Salvador Illa, y mientras no le concedan algo a Puigdemont para que se esté quietecito lo cierto es que BBVA no podrá doblegar al Sabadell. 

Una fusión en el tiempo será complicada y una fusión de efectos retardados, el modo del Santander con Banesto, no es algo aconsejable, sobre todo cuando la capacidad de gestión, sobre todo en pymes, no la tiene el grande sino el pequeño.

¿Y Villarejo? En el BBVA dicen que no preocupa pero ocupa. Más que nada porque en el BCE, las salvas se pueden volver lanzas

Y todo esto lleva a que Carlos Torres ya le ha prometido a Pedro Sánchez que puede contar con él. Por de pronto, se quedarán en Telefónica -por su gusto ya se habría ido- y apoyará las decisiones de la SEPI en la operadora, en primera oposición de saludo, 

Ya hemos dicho que Torres Vela se ha convertido en el banquero del Gobierno, en el banquero de Pedro, para lo que usted guste mandar.