Anda algo molesto el ministro de Economía, Carlos Cuerpo (Charles Body) con el presidente del BBVA, Carlos Torres. Y es que la táctica del banco con sede en Bilbao, sobre todo de su presidente, está consistiendo en pregonar por el sector y por los medios especializados que el Gobierno se ha opuesto a su OPA contra el Sabadell pero que cambiará de opinión en breve. Es sólo una pose. Porque en el BBVA, como en todo el sector bancario, saben que ninguna OPA sale adelante contra el gobierno. Esto lo saben hasta los McKinsey.
Incluso los más osados, se atreven a aventurar que ya han cambiado de opinión, especialmente tras la Junta general extraordinaria que el BBVA celebrara semanas atrás. Todo es una cuestión de táctica y de calendario, aseguran los voceros de Carlos Torres.
Pues bien, en Economía aseguran que no es así. Y como aviso para navegantes el ministro Cuerpo ha repartido entre sus colaboradores más próximos esta consigna: el gobierno sigue estando en contra de la OPA del BBVA sobre Sabadell. Los argumentos con los que se opone a la misma siguen vigentes y seguirán durante mucho tiempo, al menos mientras se elabore lo que Cuerpo denomina un "informe técnico" que no dictamine lo contrario. Para ese informe ha de haberse posicionado la CNMC, cuestión de meses.
Sobre todo los argumentos contra la OPA del BBVA son dos. Que no ayuda, todo lo contrario, a la inclusión financiera y que intensifica el oligopolio bancario vigente en España. El segundo es mucho más sólido que el primero.
En efecto, al final quedarían tres grandes bancos, luego nadie y luego el resto.
Sí, andan un poco molestos con Carlos Torres, en el Paseo de la Castellana 162.