El presidente del Salvador, Nayib Bukele, ha dicho y hecho cosas muy buenas. La sociedad salvadoreña va bien, un país experto en asesinatos, violaciones y en abusones, ha pasado a la historia. La gente vive tranquila y todos aplauden a Bukele.
Pero Bukele cometió el error de adoptar el bitcoin y convertirlo en moneda de curso legal con poder liberatorio de deudas, ahora, la economía salvadoreña está negociando un rescate con el FMI. No digo que el bitcoin se el único motivo de esta calimatosa situación pero algo ayuda.
Sufrimos una ola anarcolibertaria en la derecha. Se comprende, ante la burocracia asfixiante de la izquierda pero la solución no son las criptomonedas.