Bank Of América, Morgan Stanley y BNY Mellon han presentado sus resultados correspondientes al primer semestre del año. Tres bancos muy distintos como para establecer comparaciones en bloque entre la banca europea y la norteamericana pero sí puede decirse que las entidades gringas tienden a adaptarse con más rapidez que las europeas a los cambios en el precio del dinero.
En cualquier caso, una sólida cuenta de resultados, la del histórico BoA, el rey de la Costa Oeste. Con un morosidad muy baja, aún tiene que ganar en rentabilidad, pero va camino de ello.
Morgan Stanley no es un banco, sino dos. Sigue presumiendo de ser la primera entidad de banca privada del mundo, pero la división de banca de inversión está varada ¿Esto es malo? Según se mire. Precisamente, el común denominador de estos resultados bancarios puede definirse así: la banca doméstica va mejor que la banca al por mayor
Lo mismo ocurrió con Citigroup y Wells Fargo los primeros en presentar resultados.
Morosidad mínima y rentabilidad con muchos altibajos
Pues eso: que la banca de inversión no funciona pero no sé si eso es malo, porque los banqueros mejor pagados se han convertido en comisionistas que están imitando al capital riesgo: poco capital y ningún riesgo.
En cualquier caso, han estirado tanto la cuerda que los bancos de inversión tienden a la desaparición. Ojalá, porque es una banca que cumple una escasísima aportación al bien común. Antes, al menos, arriesgaba dinero en procesos corporativos; ahora, cada vez menos: se dedica a jugar con el dinero de los demás.
Mellon también recupera rentabilidad, con un fuerte margen financiero. Es un banco todo terreno, pero que se ha quedado en la segunda división. A lo mejor se está más cómodo ahí.