Boeing se puede seguir calificando como ‘El Pupas’, incluso algo más, porque parece que tiene gafe o que le han echado mal de ojo. Llegan más problemas para el ingeniero Robert K (más conocido como “Kelly”) Ortberg en sus primeros días como presidente y CEO: ahora ha habido dos muertos y un herido grave al explotar una rueda de un avión 757 de la aerolínea Delta Airlines en el Aeropuerto Internacional Hartsfield-Jackson, en Atlanta (estado de Georgia, EEUU), durante unos trabajos de mantenimiento.

Con 64 años, “Kelly” Ortberg lleva desde el pasado 8 de agosto como presidente y CEO de Boeing, tras haber dejado el ‘retiro’ del que disfrutaba desde que le prejubilaron en su anterior empleo en 2021. Cuenta con 35 años de experiencia en el sector aeroespacial y fue fichado para sustituir a Dave Calhoun (67 años) e intentar cambiar el rumbo del fabricante aeronáutico estadounidense.

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Sin embargo, en sus primeros 20 días, “Kelly” Ortberg ya lleva varias dificultades. En primer lugar, tuvo que afrontar que EEUU ordenara la inspección inmediata de 895 aviones 787. Segundo, Space X (la empresa espacial de Elon Musk) ha sido la elegida por la NASA para el viaje que traerá de vuelta a dos astronautas desde la Estación Espacial Internacional, sustituyendo a la nave Starliner (propiedad de Boeing), que regresará vacía a la Tierra.

A esto se suma un tercer problema y es serio. Han muerto dos trabajadores de Delta Airlines y otro más ha resultado herido de gravedad al explotar la rueda de un avión Boeing 757. El suceso no ha ocurrido en vuelo, sino cuando estaba parado en el aeropuerto de Atlanta y se estaba procediendo a su traslado hacia las instalaciones de mantenimiento para realizar algunos trabajos.