Boeing aún no despega, aunque reduce pérdidas a la mitad y aumenta ingresos en los nueve primeros meses del año. Y lo ha logrado al tiempo que ha tenido que afrontar mayores gastos, como tantas otras compañías de múltiples sectores.
Sin embargo, el fabricante aeronáutico estadounidense ha recibido castigo bursátil por parte de los inversores, pues su cotización ha bajado un 2,54%, tras rebajar la previsión anual de entregas de aviones 787 por problemas con un proveedor. En concreto, ha pasado de estimar entre 400 y 450 entregas a entre 375 y 400, por problemas de calidad en el proveedor Spirit AeroSystems, que fabrica fuselajes para el lucrativo sector de aviones de fuselaje estrecho, según ha detallado Reuters. Además, este mes informó de que había ampliado el alcance de las inspecciones de un defecto de producción derivado de agujeros mal perforados que afectan a su avión más vendido (el 737 MAX 8).
Boeing ha continuado con la fuerte reducción de pérdidas netas, como en anteriores periodos, y se han situado en 2.091 millones de euros en los nueve primeros meses, casi la mitad que hace un año. Aunque lógicamente, esta cifra ha sido superior a los números rojos del primer trimestre (-384,6 millones) y del primer semestre (-518 millones). También ha reducido las pérdidas operativas en un tercio, hasta los 998,4 millones.
Por su parte, los ingresos han crecido un 20%, hasta 53.679 millones: 22.225 millones (+40%) han procedido del negocio de aviones comerciales (incluyendo 371 entregas, un 13% más, y la mayoría han sido del modelo 737) y 17.259 millones (+7%) de la división de Defensa, Espacio y Seguridad. Mientras los gastos se han incrementado un 12%, situándose en 47.980 millones.
Los ingresos han crecido un 20%, hasta 53.679 millones: 22.225 millones (+40%) han procedido del negocio de aviones comerciales (incluyendo 371 entregas, un 13% más, y la mayoría han sido del modelo 737)
Boeing está en plena transición hacia un ritmo de producción de cinco aviones 787 al mes y 38 aviones 737 al mes para finales de año, y su cartera asciende a 445.074 millones, incluyendo más de 5.100 aviones comerciales,... y seguro que no les hace ninguna gracia la idea de prohibir vuelos cortos si tienen alternativa de tren que aparece en el acuerdo entre PSOE y Sumar. De cara al conjunto del año, reafirma sus previsiones de flujo de caja operativo y libre, tras obtener un flujo de caja libre de 1.402 millones hasta septiembre, frente al de 795.000 euros de hace un año.
Tras la larga crisis que Boeing lleva atravesando los últimos años (la del 737 Max surgida por problemas de seguridad y dos accidentes que causaron 346 muertes; y el batacazo del Covid-19), el CEO, Dave Calhoun, ha referido en un mensaje con los empleados que, pese a los retos, están en “el buen camino hacia la recuperación a largo plazo” y que la demanda sigue siendo fuerte en los mercados clave, ojo, no olviden que hay crisis de oferta en el sector aéreo mundial porque sobra demanda y faltan aviones. "Este es un negocio complejo, de ciclo largo, y los cambios duraderos llevan tiempo, especialmente cuando todo un sector se recupera de los efectos de una pandemia mundial”, ha añadido, destacando que han aumentado el rigor en sus procesos de calidad, están inculcando más la transparencia y han contratado a decenas de miles de ingenieros y mecánicos adelantando inversiones clave.