Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF) no recupera terreno en bolsa, donde la cotización baja un 5% este lunes 9 (aunque al final de la sesión la caída se suavizó al 3,37%, con un Ibex 35 que bajó un 2,2%) y acumula una depreciación del 22% este año y del 28% durante los últimos doce meses. Todo ello, pese a superar beneficio, Ebitda y ventas preCovid, y los motivos no tienen que ver con la gestión: la guerra en Ucrania, la crisis de suministros y varias huelgas (la de transporte y otra en Solaris de 28 días durante la negociación del convenio).
El fabricante de trenes y autobuses eléctricos con sede en Beasain (Guipúzcoa) ha recibido una negativa reacción bursátil a las cifras del primer trimestre, al cierre de mercado del pasado viernes, aunque no son malod datos, algo que ya le pasó cuando dio a conocer los resultados anuales de 2021. El beneficio neto se ha situado en 20 millones de euros, un 21% superior al de hace un año (16 millones) y por encima de los 14,46 millones del primer trimestre de 2019, cuando aún ni se pronosticaba el Covid-19. El beneficio bruto de explotación (Ebitda) ha ascendido a 57 millones, en línea con el de hace tres años (57,36 millones). Sin embargo, el margen Ebitda sobre ventas ha sido del 7,8% y por tanto inferior al previsto por el consenso de analistas (8,3%) y también al de hace un año (8,6%), por las huelgas, el aumento del coste energético y el mix de entregas de autobuses menos favorable, según los analistas del Banco Sabadell.
El margen Ebitda sobre ventas ha sido del 7,8%, inferior al previsto por el consenso de analistas (8,3%) y también al de hace un año (8,6%), por las huelgas, el aumento del coste energético y el mix de entregas de autobuses menos favorable, según los analistas del Banco Sabadell
Por su parte, las ventas han aumentado un 11% en el último año, a 736 millones, frente a las de 636,44 millones obtenidas hace tres años. De estas, 578 millones (+13%) vinieron del negocio de trenes y 158 millones (+6%), del de la compañía de autobuses eléctricos Solaris. Unas ventas superiores a lo esperado por los analistas del Banco Sabadell, que han subrayado que la escasez de componentes afecta en mayor medida a los autobuses del segmento e-mobility (movilidad eléctrica), que son los que aportan mayores márgenes.
En el primer trimestre, CAF ha elevado su contratación en 1.139 millones (+5%), frente a la de 1.442 millones que obtuvo en el primer trimestre de 2019. Eso sí, lo más positivo ha sido que ha registrado una cartera de pedidos récord, superando por primera vez el importe de 10.000 millones (10.043 millones), y que ha aumentado un 4% anual y supera la cartera de 8.522 millones registrada hace tres años.
CAF tiene entre sus principales accionistas a sus propios empleados (dueños del 24,973%) y a Kutxabank (14,056%). De cara al conjunto del año, ha confirmado sus objetivos de aumentar las ventas por encima del mercado tanto en trenes como en autobuses, aunque los incrementos serán menos significativos y no alcanzarán el doble dígito. Respecto a los márgenes, la compañía que preside Andrés Arizkorreta García y que tiene como CEO a Javier Martínez Ojinaga se ha mostrado prudente, sin descartar llegar a un 9% de margen Ebitda, aunque todo dependerá de la evolución de las cadenas de suministro y de los precios de la energía, como han subrayado los analistas del Banco Sabadell.