CIE Automotive no frena en el primer trimestre, tras haber pisado el acelerador en el conjunto de 2021 (año en que celebraba su 25 aniversario). Y es que ha logrado récords de beneficio, Ebitda y facturación, pese al complicado contexto.
A la multinacional vasca de componentes de automoción le va bien, pese a que en el sector caer casi el 5% los volúmenes producidos y hay un escenario generalizado de inflación de costes. “Estos resultados demuestran que nuestro modelo de negocio, un modelo que potencia la diversificación, realmente funciona en las circunstancias más adversas, dado que sacamos provecho de que no todas las geografías ni todos los clientes están igualmente afectados por las múltiples alteraciones del mercado”, ha destacado el CEO, Jesús María Herrera, quien fue muy bien remunerado el año pasado, pues cobró como los grandes del Ibex (9,5 millones de euros).
CIE Automotive eleva la facturación un 11,3%, a 972 millones, pese a haber producido menos coches (-4,5%), hasta marzo, y se ha marcado el objetivo de cerrar este año con una cifra cercana a 4.000 millones
Con los récords del primer trimestre el primer accionista de CIE Automotive estará feliz: Acek Desarrollo y Gestión Industrial, el holding de la familia Riberas que también controla otra compañía del sector de componentes automovilísticos (Gestamp), tiene una participación del 15,693%. A Acek le siguen en el accionariado con un 10% el brazo inversor de los March (Corporación Financiera Alba) y con otro 10% el presidente de la compañía, Antonio María Pradera y la sociedad familiar Elidoza Promoción de Empresas.
Vayamos a los números récords. CIE Automotive ha logrado un beneficio neto trimestral histórico de 82,2 millones de euros, un 5% superior al de hace un año. El beneficio bruto de explotación (Ebitda) ha ascendido a 159,5 millones (+1,4%), el beneficio neto de explotación (Ebit) se ha situado en 117,7 millones (+1,2%) y el margen operativo ha pasado del 14,8% al 16,4%.
La multinacional vasca de componentes de automoción ha elevado la facturación un 11,3%, a 972 millones, a pesar de haber producido menos coches (-4,5%) hasta marzo, y se ha marcado el objetivo de cerrar este año con una cifra cercana a 4.000 millones. Y las alegrías no acaban ahí, porque la deuda financiera neta ha descendido en 5,8 millones, a 1.389,1 millones, con una ratio sobre Ebitda de 2,34 veces.
A la vista de sus resultados del primer trimestre, parece que a CIE Automotive le va mucho mejor que Grupo Antolín, que mejoró en 2021 pero sigue en números rojos,... Además, habrá que esperar hasta el 10 de mayo para conocer la evolución de Gestamp, después de que el año pasado lograra volver a beneficios, otra empresa del mismo sector y con quien CIE coincide también en igual primer accionista (la familia Riberas).
Paralelamente, CIE Automotive ha celebrado este miércoles su Junta de Accionistas y se han aprobado todos los acuerdos propuestos. Entre ellos estaban: las cuentas de 2021, la gestión, así como el reparto de dividendo, la fijación en 14 del número de miembros del Consejo de Administración y varios nombramientos y ratificaciones de consejeros (Iñigo Barea, Suman Mishra, Elena Orbegozo, María Eugenia Girón y Javier Fernández.