Que Google censura es algo que hemos comprobado en numerosas ocasiones en Hispanidad y así lo venimos denunciando desde hace años, especialmente a raíz de la pandemia. Ahora, una filtración masiva al sitio GitHub ha dejado al descubierto algunos secretos de su algoritmo, la herramienta que posiciona los artículos y las webs en internet.
Al grano: de todos los parámetros descubiertos, hay dos que merecen especial atención. La ‘autoridad de dominio’ o del ‘site’, y la ‘lista blanca’ de dominios.
Como su nombre indica, el ‘site authority’ (autoridad del sitio) mide si una web tiene autoridad o no y según ese ranking la posiciona en las búsquedas. Lo que no se ha filtrado es en qué se basa Google para decidir si una web tiene más o menos autoridad -no es difícil de imaginar-, pero en cualquier caso, se trata de uno de los parámetros más subjetivos y que permiten un mayor control sobre el posicionamiento de las webs en las búsquedas.
Luego está la ‘lista blanca’, un grupo de dominios que gozan de condiciones especiales y favorables a la hora de posicionarse. Integran esta lista, por ejemplo, webs que durante la pandemia informaron sobre el Covid, las vacunas, etc. siempre de acuerdo a los mensajes oficiales de los gobiernos y los laboratorios. Hispanidad seguro que no está en esa lista.
Y no sólo sobre el Covid: en la ‘lista blanca’ también hay webs que informaron sobre las elecciones en EEUU, es decir, a favor de los postulados demócratas. Y si ampliamos la mirada al resto del mundo, podemos concluir que Google premia a las webs que defienden lo políticamente correcto, en el sentido más amplio del término, y castiga a las páginas que lo critican.
La filtración ha dejado al descubierto, además, la importancia de otros parámetros como, por ejemplo, introducir enlaces o destacar palabras concretas dentro de un artículo.
Todo esto pone de manifiesto la censura de Google, que no consiste en eliminar artículos de la red, sino en degradarlos a la página 30 de las búsquedas, donde nadie los verá. Lo hemos dicho muchas veces y volvemos a insistir: Google es parásito, ladrón y censor. Parásito porque coge los artículos de los medios de comunicación sin su permiso, ladrón porque les quita la publicidad… y censor, sencillamente, porque, como su propio nombre indica, censura.