Correos es un gran marrón para el socialista Pedro Saura, pues tiene mucho más difícil volver a beneficios que en Paradores... y ya se plantea hasta ajuste de plantilla. Recuerden que a Saura le cayó la presidencia de Correos a finales del año pasado, para sustituir a Juan Manuel Serrano, el amigo de Pedro Sánchez, que fue premiado con la gestión de las autopistas del Estado al ser nombrado director general de la Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre (SEITT).

 

Ya saben que las empresas públicas y semipúblicas suelen ser buenos lugares para colocar a los afines al partido que gobierne. En el caso de Correos, cabe destacar que Saura no sólo llegó para relevar a Serrano, sino después de que Sánchez tuviera que dar un premio de consolación a la socialista catalana Raquel Sánchez al no renovarla como ministra en el Gobierno de coalición que formó con Sumar el pasado noviembre. Y es que al PSC más vale tenerle contento...

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Los efectos negativos los tuvo que afrontar Saura, que recibió la presidencia de Correos tras haber devuelto a beneficios a Paradores. En este caso la tarea es más complicada, pues la empresa pública de servicio postal acumula pérdidas de unos 1.200 millones de euros, aunque los sindicatos CCOO y UGT llegaron a denunciar que estas se elevaban a casi 1.500 millones. Unas cifras que reflejan la ‘gran’ gestión de Serrano, quien en su último año cobró una retribución bruta de 207.078 euros... e incluso una indemnización de casi 25.336 euros. Por su parte, Saura recibió 1.440 euros por los cuatro días que trabajó en Correos en 2023.

El nuevo año no ha empezado bien para la empresa pública de servicio postal, a pesar de más trabajo: ha tenido que afrontar varias citas electorales (las autonómicas de Galicia y País Vasco), a las que se sumarán las autonómicas de Cataluña el próximo domingo 12 de mayo y las europeas que España celebrará el 9 de junio. Ante la delicada situación económica ha tenido que pedir un préstamo bancario para pagar las nóminas de sus más de 48.000 trabajadores, así como los bonus y salarios de los directivos, según informa Vozpópuli. Asimismo, Saura planea un ajuste de plantilla... vía prejubilaciones, como avanza ABC, aunque los sindicatos sólo aceptarán si hay un plan de entradas. Una medida más que se sumaría a la reorganización de la cúpula directiva realizada hace dos meses, con nuevos nombramientos, y con la vista puesta en volver a beneficios.