Es un comunicado corto pero revolucionario: dos noticias: Isidro Fainé renueva como presidente de Criteria, el grupo industrial de Caixa, primer accionista por ejemplo, de Caixabank (29,9%) y de Naturgy (25,7), Telefónica (5%) más otros activos que completan los 25.000 millones que vale Criteria.
Segunda noticia: Ángel Simón, primer ejecutivo de Veolia España, grupo Agbar y responsable del conglomerado francés en Hispanoamérica y Oriente Próximo, el hombre que más sabe sobre la industria del agua en España, pasa a ser consejero delegado de Criteria en sustitución de otro clásico, hombre de un gran prestigio en la casa, Marcelino Armenter, que se jubila.
Simón seguirá presidiendo Veolia España pero como presidente no ejecutivo. Su dedicación a Criteria será la que ocupe su jornada de trabajo.
En teoría, ahora Simón estaría por encima, como representante del primer accionista de José Ignacio Goirigolzarri y Gonzalo Gortázar, presdiente y CEO de Caixabank, respectivamente, así como por encima de Francisco Reynes, presidente de Naturgy. Y, por supuesto, dirigirá, mano a mano con Fainé, la política industrial de Criteria que ya no quiere controlar empresas y llevar la gestión sino diversificar sus inversiones, que son las que financian Criteria.
En la práctica, cada gestor dirige su empresa y el pulso llega cuando hay que discutir el dividendo que se lleva Criteria y que desde allí sube hasta su dueño, al 100 por 100. Es decir, hasta la Fundación Caixa, una de las mayores fundaciones del mundo, que este año batirá un nuevo récord, con 600 millones de euros de presupuesto para dedicarlos a sus principales 'especialidades': niños sin medios, enfermos terminales, vivienda social, microcréditos, etc.
Hasta aquí todo claro. Pero a nadie se le oculta, ni en Barcelona ni en Madrid, que con el fichaje de Simón para Criteria no sólo se inicia la sucesión en Criteria sino, lo que es más importante, se inicia la sucesion en la matriz, en la Fundación Caixa. Por cierto, Juan José López Burniol, vicepresidente de la Fundación pasa a ser ahora, al mismo tiempo, vicepresidente primero de Criteria.
En Fundación Caixa, la renovación está fechada para mayo. En ese momento, lo lógico es que a partir de ese momento Isidro Fainé, quien también repetirá en mayo como presidente del Patronato, quiera tener a su lado a sus sucesores definitivos, tanto en la Fundación como en Criteria, durante los próximos cuatro años.
Es la mejor manera de que, cuando él se marche, su sucesor lleve años con mando en plaza.