Continuando con las presentaciones de resultados, este viernes ha llegado la hora de International Airlines Group (IAG), el grupo con sede corporativa en Heathrow, ha conseguido en este primer trimestre del ejercicio reducir un 26,7% las pérdidas de 1.074 millones de euros (M€) anotadas al cierre del primer trimestre del 2021, aunque menos de lo esperado por los analistas... y quizás por eso se ha dado un batacazo bursátil (su cotización se ha hundido un 8,57%, siendo la caída más pronunciada dentro del Ibex en esta sesión, pero durante la misma ha llegado a registrar desplomes del 11%). Sin embargo, IAG continúa presentando números rojos por valor de 787M€, lo que, como veremos más adelante, sigue creando incertidumbres sobre las previsiones de recuperación, que han obligado a su CEO, Luis Gallego, a emplearse a fondo en la presentación del desempeño para ser convincente con el mercado, cosa que parece no haber conseguido, por lo menos a la vista de la cotización.
Si bien los términos comparativos resultan difíciles por la situación excepcional que se estaba viviendo en el pasado ejercicio, las cifras son las que son y el total de ingresos ha ascendido en este primer trimestre a 3.435M€, frente a los 968M€ obtenidos en el mismo periodo de 2021. Eso sí, aún lejos de los 4.585M€ obtenidos en el primer trimestre de 2020, cuando subieron un 33,5%, y de los 5.318 millones del mismo periodo de 2019. La diferencia de este resultado se centra en los ingresos por pasajes, con 2.655M€, 2.196M€ más que en 2021 y 1.298M€ menos que en 2020, pero aún está a un 48,9% de igualar la cifra obtenida en ese ejercicio, y también a distancia de superar los 4.623M€ del primer trimestre de 2019. Por tanto, aún queda para que el holding aéreo que agrupa las aerolíneas British Airways, Iberia, Aer Lingus y las low cost Vueling y Level recupere las cifras preCovid tras el batacazo que ha supuesto la pandemia y sus muchas olas y restricciones.
Los costes totales por operaciones han ascendido entre enero y marzo a 4.166M€, que duplican los de hace un año y son un 22,9% superiores a los de hace dos años,... y sin tener en cuenta 1.325M€ excepcionales por pérdidas en derivados por combustibles registrados en ese ejercicio
Los costes totales por operaciones han ascendido entre enero y marzo a 4.166M€, que duplican los de hace un año y son un 22,9% superiores a los de hace dos años,... y sin tener en cuenta 1.325M€ excepcionales por pérdidas en derivados por combustibles registrados en ese ejercicio. Los costes de personal, con un 25,1% del total, y los referidos al combustible, el 22,0%, son las principales partidas de este epígrafe. El resultado neto de explotación (Ebit) ha arrojado una pérdida de 731M€, mientras que en el primer trimestre de 2021 fue de -1.077M€ y en el de 2020, sin excepcionales, fue de -535M€.
Luis Gallego ha reconocido que las previsiones de -510M€ en Ebit para este primer trimestre no se han cumplido, evidentemente, ni tan siquiera los -634M€ en resultado neto, como consecuencia de que la principal ruta del grupo, que es la del Atlántico Norte, se ha quedado un 5% por debajo de la capacidad operativa prevista. Eso sí, ahora esperan que en el tercer trimestre se haya recuperado y también obtener ya resultados positivos en el próximo trimestre, con crecimientos del 80%, 85% en el 3º y alcanzar el 100% en el último.
Luis Gallego ha reconocido que las previsiones de -510M€ en Ebit para este primer trimestre no se han cumplido, evidentemente, ni tan siquiera los -634M€ en resultado neto, porque la principal ruta del grupo, que es la del Atlántico Norte, se ha quedado un 5% por debajo de la capacidad operativa prevista
Los gastos no operativos netos, que incluyen, 233M€ de gastos financieros, ascienden a -185M€, un 21% superiores al 2021 y 163M€ más de perdida que en el 2020. La deuda neta asciende a 11.593M€, 29M€ más que en el ejercicio anterior en el que obtuvo 1.010M€ en prestamos ICO. Eso sí, la tesorería al cierre del primer trimestre del presente ejercicio asciende a 8.184M€, 209M€ más que en el mismo periodo del anterior.
Muy eufórica me ha parecido la presentación de estos resultados, que francamente no son buenos y así lo está recogiendo el mercado, ya que su cotización ha cerrado la jornada con una cañida del 8,57%, hasta 1,55 euros (€), siendo la más baja en el último mes y entre las cinco menores de los últimos 12 meses. Los motivos son claros: se está aplazando la mayor rentabilidad anunciada para este primer trimestre a posteriores sin contar con factores como la fortaleza del dólar, la situación geopolítica con la invasión rusa de Ucrania, los contagios de Covid en China continúan subiendo y con que los precios del combustible siguen en alza. Si a esto le añadimos que los analistas estiman que la recuperación de los vuelos de los pasajeros de negocios, segmento de clientes con el que se identifica a las compañías Iberia y British Airways, que la recuperación de este sector al 80% se alargará hasta el 2024. Y esto tampoco hay que perder de vista la elevada deuda que acumula (la deuda neta asciende hasta marzo a 11.593M€, en línea con la de 11.667M€ de hace un año), por lo que le será difícil pagar dividendos y/o recomprar acciones propias en bastante tiempo, pues además deberá contar, tarde o temprano con inversiones en capex para renovar o ampliar flota. Se me antoja una tormenta casi perfecta que lastrará su salida de esta crisis.
Y ojo, porque en el entretanto no renuncia a una sonada operación corporativa. Hace un mes, Gallego insistió en que la meta es comprar el 100% de Air Europa y se dan un plazo de 18 meses... pero todo dependerá de Juan José Hidalgo (más conocido por ‘Pepe Aviones’), presidente de Globalia, como bien saben. Por ahora, este último ha conseguido que IAG ponga más dinero.