A Statkraft le ha pasado factura el tipo de cambio y el alto pago de impuestos, pues ha tenido unas pérdidas de 118 millones de euros en el segundo trimestre. Y todo ello, pese a haber obtenido un sólido beneficio operativo (Ebit) y mayores ingresos.
La empresa hidroeléctrica, propiedad del Estado noruego y con 127 años de historia, es líder en generación hidroeléctrica, en producción de energía renovable en Europa y en el mercado de PPAs (contratos de compraventa de energía a largo plazo). En concreto, produce energía hidroeléctrica, eólica, solar y con gas, y también suministra calefacción urbana, y cuenta con 4.800 empleados en 19 países. Ahora ha advertido de volatilidad sin precedentes en los mercados, altos precios de la energía y de que se ha acelerado la crisis energética en Europa, la cual surgió tras la invasión rusa de Ucrania y el inicio de la guerra en dicho país, por el descenso de los suministros de gas ruso. Una crisis energética, que ha provocado “unos altos precios de la energía y un gran incremento de los ingresos brutos de Statkraft”, ha explicado su consejero delegado, Christian Rynning-Tønnesen.
“La combinación entre un clima seco y el alto riesgo de un racionamiento del gas en Europa para el próximo invierno, especialmente en Alemania, ha aumentado los valores hídricos de Statkraft”, destaca Rynning-Tønnesen
Entre abril y junio, Statkraft ha tenido unas pérdidas de 118 millones por el efecto negativo del tipo de cambio y el alto gasto en tributos por los sólidos ingresos que ha tenido con su producción hidroeléctrica -la cual se ve gravada por un impuesto sobre los recursos-, una cifra 354,6 millones inferior a la de hace un año. Asimismo, “el aumento considerable en los precios futuros de la energía se ha traducido en un efecto negativo de cambio de valor de las coberturas”, ha destacado Rynning-Tønnesen. El beneficio operativo (Ebit) se ha situado en 374,3 millones, porque “la combinación entre un clima seco y el alto riesgo de un racionamiento del gas en Europa para el próximo invierno, especialmente en Alemania, ha aumentado los valores hídricos de Statkraft. La importancia de ahorrar agua para el próximo invierno está creciendo y se ha traducido en una menor producción hidroeléctrica en Noruega”.
Por su parte, los ingresos brutos operativos han aumentado en casi 984,8 millones por los altos precios del mercado spot (el que se paga al contado en el momento de la entrega en función del mercado diario de la materia prima -en este caso la cotización del gas en mercados internacionales, siendo el TTF holandés el de referencia en Europa-). Los precios a futuro de la energía se han incrementado de forma significativa, resultando en pérdidas por ajuste de valor de 856,8 millones, fundamentalmente por efecto de estas posiciones de cobertura. Además, Statkraft ha destacado que el precio medio del sistema noruego ha ascendido a 121 euros por megavatio hora (MWh), frente a los 42 euros/MWh del segundo trimestre de 2021. Y el flujo de caja operativo ha ascendido a 1.635 millones, reforzando su sólido balance.
En el conjunto del primer semestre, Statkraft ha tenido un beneficio neto de 1.004,6 millones y un Ebit de 2.147 millones. Hace casi un mes, la compañía anunció que aceleraba su crecimiento renovable con nuevos objetivos a 2030, pasando de un crecimiento anual 2,5-3 gigavatios (GW) en 2025 a 4 GW anuales en 2030, llegando a 30 GW nuevos de capacidad al final de la década, e incrementando su producción anual un 50%. Todo ello, apostando por eólica terrestre, solar, almacenamiento con baterías, hidroeléctrica, eólica marina e hidrógeno verde. En España, Statkraft desarrolla una cartera renovable de 2.500 MW y opera otros 500 MW: ha iniciado la construcción de Talayuela II, ha encarado la fase final de la construcción de cuatro nuevas plantas fotovoltaicas en la provincia de Cádiz y ha seguido reforzando su liderazgo en PPA con nuevos contratos.