Nueve años ha cumplido, el pasado mes de enero, el fondo de José Antonio Larraz y de su socio, Alejandro Múñoz: Equam Capital. Así que, no hay mejor excusa para hablar, aquí en Hispanidad, con José Antonio Larraz, no solo de la satisfacción que ha supuesto que “2023 ha sido un buen año para nosotros ya que hemos tenido una rentabilidad del 23% batiendo a nuestros índices comparables con dividendos y a otros fondos españoles con perfil similar al nuestro”, sino de los asuntos que marcan la actualidad de los mercados y de la economía en general.
Por cierto, el próximo 20 de febrero, Equam celebra su conferencia anual con analistas.
Y, sin más, comenzamos.
-En 2024 se descuenta ya que se van a producir las primeras bajadas de tipos. Pero la FED parece que, de momento, se lo toma con calma…
Nada sorprendente teniendo en cuenta que pensamos que la inflación no va a ser tan fácil de controlar como inicialmente nos querían hacer pensar, pero es que además no creemos que sea positivo volver a la situación de “dinero gratis” que hemos vivido en los años anteriores. Hay que tener en cuenta que desde una perspectiva histórica el nivel de tipos actuales no es excesivamente alto. Unos tipos de interés que no estén artificialmente manipulados por los bancos centrales representan un pilar fundamental de la economía capitalista de cara a remunerar correctamente el ahorro, desincentivar aquellas inversiones que no tienen sentido económico ni financiero y por tanto evitar las burbujas financieras.
-¿Piensa que en Europa la situación será diferente y si se tomará la decisión de reducir tipos?
Los comentarios a la anterior pregunta aplican igualmente a Europa. Además, hay que tener en cuenta que la subida en Europa ha sido inferior a la de Estados Unidos y por tanto la necesidad de bajar debería ser aún menor.
Desde el lanzamiento del fondo, hace nueve años, hemos conseguido una rentabilidad anualizada del 7,5%, superando a nuestros índices comparables en más de 1,8% anual
-En 2023 la situación de inflación en España se ha ido estabilizando a medida que avanzó el año y se ha producido un crecimiento superior al esperado.
Hay que tener en cuenta que España sufrió más durante la pandemia y experimentó una mayor ralentización económica que otras economías por lo que no es sorprendente que ahora estemos creciendo más rápido que otros países. No somos excesivamente positivos respecto a nuestro país ya que creemos que se están destruyendo las bases para atraer nuevas inversiones debido al incremento de la inseguridad jurídica y a la cada vez mayor intervención del estado en distintos ámbitos de la economía.
-2023 para Equam, ¿ha cumplido las expectativas de las que hablábamos en las últimas entrevistas?
2023 ha sido un buen año para nosotros ya que hemos tenido una rentabilidad del 23% batiendo a nuestros índices comparables con dividendos y a otros fondos españoles con perfil similar al nuestro. Sin embargo, no nos gusta pensar solo en el comportamiento de un determinado año ya que creemos que la inversión tiene que ser vista como una carrera de fondo con una visión a largo plazo y que lo realmente relevante es la rentabilidad conseguida en periodos plurianuales. En nuestro caso desde el lanzamiento del fondo hace 9 años hemos conseguido una rentabilidad anualizada del 7,5%, superando a nuestros índices comparables en más de 1,8% anual.
-Pensando en los próximos trimestres: ¿Dónde ve oportunidades para los inversores? ¿Seguiremos viendo la fortaleza del mercado en EEUU o Europa nos dejará sorpresas? ¿Dónde están centrando el foco en Equam?
Tenemos que tener en cuenta que el comportamiento del mercado en los últimos años ha venido muy marcado por las siete grandes compañías de Estados Unidos que pesan ya más de un 30% en el mercado americano y son ellas las que en una gran parte han movido los índices. Sin embargo, estas compañías están cotizando a múltiplos muy exigentes.
Tenemos que tener en cuenta que el comportamiento del mercado en los últimos años ha venido muy marcado por las siete grandes compañías de Estados Unidos
Nosotros vemos una oportunidad clara en el entorno de las compañías de capitalización pequeña y mediana de economía tradicional que han quedado claramente rezagadas en los últimos años a pesar de que muchas de ellas siguen teniendo un muy buen comportamiento de sus negocios. Y pensamos que esta oportunidad es todavía mayor en Europa donde las valoraciones en muchos casos son de derribo.
-¿A que considera que se debe esta disparidad?
A lo que comentaba anteriormente, los inversores ante grandes momentos de incertidumbre persiguen el refugio de las grandes compañías y también a la generalización del uso de ETFs que magnifican el efecto de que los flujos de dinero vayan en la dirección de las grandes compañías en contra de las pequeñas. Por otro lado, las políticas monetarias laxas de los últimos años han favorecido la inversión en compañías de crecimiento frente a las de economía tradicional más estables que sin embargo siguen teniendo una buena evolución de sus negocios.
-Dicho lo cual, es fácil deducir que este es su momento, ¿no es así?
En efecto, pensamos que ahora mismo la combinación de los distintos factores económicos nos deja la situación perfecta para que el mercado empiece a reconocer el verdadero valor de las compañías que tenemos en cartera y que por cierto cotizan a unas valoraciones bajísimas, dejando un potencial para nuestro fondo en máximos (a pesar de los buenos resultados obtenidos este año).
-Ante esta situación, ¿Qué diría a los inversores más conservadores que se hayan sentido cómodos este pasado año con unas rentabilidades mayores?
Nosotros pensamos que la mejor forma de rentabilizar los ahorros con una visión a largo plazo es invertir en activos de renta variable (empresas cotizadas) que van a permitir optimizar las rentabilidades, y más especialmente en aquellos fondos donde se hace una selección activa de las empresas en las que se invierte y los gestores están alineados invirtiendo su patrimonio.
Vemos una oportunidad clara en compañías de capitalización pequeña y mediana de economía tradicional que han quedado claramente rezagadas en los últimos años
Sin embargo, es cierto que es necesario invertir dinero que no se va a necesitar en el corto plazo y tener la capacidad de aguantar la volatilidad de los mercados sin ponerse nervioso en esos casos. Si no es está dispuesto a esto, entonces es mejor buscar otro tipo de activos que no tengan dicha volatilidad pero siendo conscientes de que en ese caso se va a sacrificar una buena parte de la rentabilidad.