Seguimos con nuestros análisis de resultados. Hoy miércoles es el turno de una de las empresas con más polémicas en 2023, Ferrovial. Sus cuentas resultan especialmente interesantes por ver el impacto que ha tenido en sus resultados su mudanza en términos de domicilio social. No debemos perder de vista que, con su marcha a los Países Bajos (mercado en el que empezó a cotizar hace unos meses) buscaba financiarse mucho más barato, además de poner tierra de por medio de la brutal presión fiscal que ejerce nuestro “querido” Gobierno sobre los contribuyentes.
Para comenzar, vamos a estudiar brevemente su situación en bolsa. La cotización de Ferrovial ha sufrido un descenso acumulado del 2,2% en el último mes. Nada comparable a otros conjuntos empresariales analizados en el día de hoy, como es el caso de Naturgy, con un descenso en igual comparativa del 12%. A cierre de la sesión del día 27 de febrero de 2024, la cotización del grupo se ha situado en los 34,75 euros, suponiendo un decremento respecto al cierre de la sesión del día anterior de un 0,71%. Decremento muy superior en 50 puntos básicos al del IBEX 35 en igual comparativa, índice del que salvo nueva orden el conjunto empresarial todavía forma parte a día de hoy.
Lo que supone una buena noticia para los accionistas de Ferrovial, el primero es su presidente, Rafael del Pino, que controla el 20,4% del capital, seguido de su hermana María del Pino (8,2%); el fondo británico TCI (6,4%), fundado por Christopher Hohn, un británico multimillonario que aparece en el puesto 273 de la lista Forbes de las mayores fortunas del planeta; su otro hermano Leopoldo del Pino (4,1%) y los fondos BlackRock (3,18%) y Lazard (3%).
La cifra de ingresos del grupo constructor sigue en 2023 su senda ascendente, con unas ventas que crecen un 13,2% respecto al 2022, aproximadamente 963 millones de euros más, hasta alcanzar los 8.514 millones de euros. Este incremento de las ventas de Ferrovial se debe principalmente al buen comportamiento de: (i) Construcción, que sube un 9,9% y de (ii) Autopistas con un aumento del 42,1%.
En cuanto a su división de Aeropuertos, sus activos experimentaron crecimiento del tráfico: Heathrow recibió a 79,2 millones de pasajeros, el tercer dato más alto de su historia, lo que representa un aumento del 28,6%. Anque no debemos olvidar que Ferrovial llegó a un acuerdo para vender la totalidad de su participación en el Aeropuerto de Heathrow de Londres, en el que estaba presente con el 25%, por 2.368 millones de libras (2.735 millones de euros) al fondo galo Ardian y al fondo soberano de Arabia Saudí The Public Investment Fund (PIF).
Pero el acuerdo se le ha complicado a del Pino, porque varios accionistas del aeropuerto británico quieren ejercer su derecho a vender (conocido como ‘derecho de acompañamiento’) otro 35% al mismo comprador.
El beneficio neto se sitúa en los 460 millones de euros, lo que se traduce en un incremento interanual del 147%, según ha informado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Crecen los ingresos y el beneficio y también lo hace el resultado bruto de explotación (EBITDA), en concreto un 40,6%, pasando de 728 millones de euros a 991, lo que demuestra la capacidad de generación de recursos de Ferrovial.
Pero no todo son buenas noticias, la compañía sigue en sus trece de incrementar el endeudamiento año tras año. A cierre de 2022 la deuda neta consolidada fue de 5.781 millones de euros, pasando a ser a cierre de 2023 de 5.979 millones de euros, lo que supone un incremento del 3,4%. Sin embargo, la buena evolución del EBITDA en igual comparativa ha hecho mejorar, pese a este incremento de deuda neta, la ratio Deuda Neta/EBITDA en igual comparativa. La misma ha pasado de ser del 7,9 al 6,03.
A la vista de los números presentados por Ferrovial, podemos concluir que su marcha de España, por desgracia, le ha sentado muy bien a la compañía, aumentado sobremanera su resultado en 2023, así como el resto de principales cifras, como ingresos y EBITDA. Además, pese a haber incrementado su deuda neta, ha mejorado su capacidad de devolución.
Rafael del Pino puede estar de enhorabuena, aunque merece la pena mencionar que va camino de los 66 años, por lo que no es descabellado empezar a pensar en su sucesión. Después de conseguir estar al frente de la compañía, con poder casi totalitario, todo llama a pensar que será uno de sus hijos el que se hará con la dirección cuando se jubile. Rafael es padre de seis hijos, tres varones de su primer matrimonio con Cristina Fernández-Fontecha, que falleció, Rafael, Ignacio y Juan, y tres mujeres de su segunda esposa, Astrid Gil-Casares, de la que está divorciado, Tadea, Alec y Cleo.
Rafael, el primogénito trabaja en Ferrovial, pero es Ignacio el que ha sido elegido para seguir sus pasos en la compañía, y ya es director financiero corporativo y está al frente de Ferrovial International SE Sucursal, la filial creada por la multinacional para mantener su presencia en España tras su salida a Países Bajos. Ignacio tiene 34 años y cursó, al igual que su padre, un MBA en Standford. Comenzó su carrera en Londres en JP Morgan y OakTree, y también trabajó en Cintra, la filial de autopistas de Ferrovial. Parece que todo está preparado para una sucesión 'tranquila', aunque todavía no hay fecha. La verdad es que don Rafael ya no tiene rival entre sus hermanos como si tuvo en el pasado, así que...
En cualqueir caso, a Rafael Del Pino Calvo-Sotelo su 'patriótica' huida de España no le ha venido muy mal. ¿Sabemos ya por qué se marchó de España? Sí, porque no aguantaba a un tal Pedro Sánchez. Bueno, y también por la inseguridad jurídica. Lo que está claro es que a España y a su imagen exterior, Ferrovial no les hizo ningún favor.