Sam Bankman-Fried, fundador de la plataforma de compraventa de criptos FTX, salió de prisión tras depositar una fianza de 235 millones de dólares y considerar el juez que es poco probable que se fugue. En cualquier caso, el horizonte judicial de Bankman-Fried es bastante oscuro: está acusado de hasta ocho cargos, entre otros de fraude, conspiración y lavado de dinero.
Mientras aguarda bajo arresto domiciliario en la casa de sus padres, en California, su exnovia, Caroline Ellison, y el confundador de la plataforma, Gary Wang, han dado un paso al frente y se han declarado culpables. En otras palabras, los dos están dispuestos a colaborar con la justica y podrían estrechar todavía más el cerco judicial de Bankman-Fried. Hablamos de dos directivos con mucha información. Ellison, además de exnovia, era la directora de Alameda Research, adonde era desviado el dinero de FTX, y Wang era nada más y nada menos que cofundador de la plataforma, como hemos señalado antes.
En definitiva, el asunto no pinta nada bien para Bankman-Fried.