La facturación de las empresas entre los meses de octubre y septiembre de 2022, eliminando los efectos estacionales y de calendario, bajó un 1,3%. Esta tasa es 2,7 puntos inferior a la del mes anterior, según el Índice de Cifra de Negocios Empresarial (ICNE) publicado este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

 

Es más, ninguno de los cuatro sectores analizados, Comercio, Industrias extractivas y manufacturera, Servicios no financieros de mercado y Suministro de energía eléctrica y agua, saneamiento y gestión de residuos, presenta tasas mensuales positivas. El mayor descenso se registra en Suministro de energía eléctrica y agua, saneamiento y gestión de residuos (−10,5%).

Y para continuar con los malos datos, el Índice General de Cifra de Negocios Empresarial, corregido de efectos estacionales y de calendario, presenta en octubre una variación del 19,9% respecto al mismo mes del año anterior: sí seguimos en variación anual positiva, pero esta tasa es 6,5 puntos inferior a la de septiembre.

Octubre ha sido un mes negro para las empresas, algo que ya avisaron todos los organismos e instituciones privadas: el cuarto trimestre no pintaba bien, por mucho que doña Nadia lo niegue. También lo advirtieron los autónomos: hace unos días, el 37,8% afirma que su actividad ha sufrido un descenso en el 2022. Hoy conocíamos el desastroso dato del PIB y en la facturación empresarial tenemos el primer dato en negativo: vamos camino de la recesión.