Pilar González de Frutos ha decidido jubilarse y poner punto y final a su etapa como presidenta de Unespa, cargo que ocupa desde 2002 y ha renovado hasta en cinco ocasiones. En abril abandonará definitivamente la patronal de los seguros para dar paso a su sucesor, que saldrá de la terna que presenten las tres grandes del sector, Mapfre, VidaCaixa y Mutua Madrileña.
Sea como fuere, la mejor situada para recoger el testigo es Mirenchu del Valle, número dos de Unespa y persona de confianza de De Frutos, por varias razones. Conoce la patronal a la perfección -llegó en 1988-, es una candidata que cuenta con el consenso de las tres grandes y, además, no necesita presentación en Insurance Europe, la organización que agrupa a 36 asociaciones europeas. Ahora bien, el perfil de Del Valle es más técnico, es decir, no tiene un perfil tan político como De Frutos, que en los últimos años ha protagonizado innumerables titulares -y críticas a los gobiernos- por considerar urgente la necesidad de reformar el sistema público de pensiones y favorecer el desarrollo de sistemas privados complementarios.
Nacida en Navares de Ayuso (Segovia) en 1956, De Frutos, que también ocupa una vicepresidencia en la CEOE, ha estado ligada al sector asegurador durante toda su trayectoria profesional. Comenzó en 1980 realizando tareas de supervisión en la Dirección General de Seguros y Fondo de Pensiones, del Ministerio de Economía. En 1983 entró en el Consorcio de Compensación de Seguros, primero como subdirectora técnica de Operaciones (1983-1988) y luego como directora de Operaciones, hasta 1997, cuando se convirtió en directora general de Seguros, dentro del Ministerio de Economía. Allí permaneció hasta que entró en Unespa, en 2002, como hemos dicho antes. Actualmente, además, es consejera independiente de Endesa.