En estas semanas, muchas empresas celebran o convocan su Junta de Accionistas y no todos los primeros espadas las afrontan de la misma manera. Decíamos que a Ignacio S. Galán, presidente y CEO de Iberdrola, que se ha lanzado contra todos en las últimas semanas, le preocupan los informes de los proxys advisors (los que asesoran a inversores, principalmente a los accionistas institucionales), pero no a la presidenta de Coca-Cola Europacific Partners (CCEP), Sol Daurella Comadrán,… y además la bolsa aplaude la política de remuneración de la ‘megaembotelladora’ europacífica del famoso refresco de receta secreta.
CCEP ha enviado una carta a los accionistas que ha remitido al regulador bursátil español (CNMV) y conviene destacar que entre estos accionistas el principal es la familia española Daurella. En concreto, la sociedad Olive Partners controla el 36,4% de la ‘megaembotelladora’ y cuenta con cinco representantes en su Consejo de Administración: Sol Daurella, José Ignacio Comenge, Álvaro Gómez-Trenor Aguilar, Alfonso Líbano Daurella y Mario Rotllant. Los Daurella poseen el 56% de Olive Partners a través de Cobega Invest, sociedad donde están presentes sus cuatro ramas familiares (los Daurella Comadrán, los Daurella Aguilera, los Líbano Daurella y los Figueras-Dotti Daurella, con participaciones respectivas del 34%, 32%, 16% y otro 16%); y también están otros antiguos embotelladores españoles de Coca-Cola (los Gómez-Trénor, con un 21%, y los Comenge). Además de Olive Partners, en el accionariado CCEP está la multinacional con sede en Atlanta The Coca-Cola Company, con un 19%, como segundo accionista privado destacado; y también hay un 45% de free float.
El ‘proxy’ Glass Lewis recomienda el voto a favor de la política de remuneraciones, considera que los accionistas pueden estar razonablemente satisfechos de que los resultados finales coincidieron en general con las expectativas y señala que las decisiones de remuneraciones fueron “en el mejor de los intereses de los accionistas”
En la misiva, la ‘megaembotelladora’ europacífica ha defendido la política de remuneración del último año, entre otros aspectos de las 29 propuestas que votarán los accionistas en la Junta que se celebrará el próximo 27 de mayo, además ha incluido los argumentos de dos grandes proxys de EEUU (Glass Lewys e Institutional Shareholder Services -ISS-). El primero recomienda el voto a favor de todos los acuerdos propuestos, pero no hace lo mismo ISS, que aconseja el voto en contra de tres.
En concreto, a ISS no le gusta la política de remuneración de los consejeros porque el Comité ejerció su discreción al determinar un nivel de adjudicación del 45% del máximo para los planes de incentivo a largo plazo (LTIP, por sus siglas en inglés) del año fiscal 2019 a pesar de un resultado formulaico de cero, un uso que no está en línea con las mejores prácticas de Reino Unido. Además, refiere el impacto significativo de dicha discrecionalidad: un LTIP otorgado equivalente a 2,35 veces el salario del CEO y constituyendo el 36% de su cifra total única para el año fiscal 2021. Claro que el proxy Glass Lewis recomienda el voto a favor de dicha política de remuneraciones y considera que los accionistas pueden estar razonablemente satisfechos de que los resultados finales coincidieron en general con las expectativas, reconociendo la justificación del Comité para usar la citada discrecionalidad, y señala que las decisiones de remuneraciones fueron “en el mejor de los intereses de los accionistas”. ¡Toma ya! En 2021, Sol Daurella cobró 591.000 libras esterlinas (unos 696.000 euros al tipo de cambio actual); y el CEO, Damian Gammell, unos 9,04 millones de euros principalmente por el bonus anual y el incentivo a largo plazo; por citar sólo algunas remuneraciones; y el dividendo siguió aumentando tras la compra de Amatil.
El ‘proxy’ ISS aconseja el voto en contra de las reelecciones de Manolo Arroyo y de Mario Rotllant como miembros no independientes del Comité de Retribuciones de CCEP, porque considera que los comités de retribuciones deben estar formados sólo por consejeros independientes
A ISS tampoco le hace ninguna gracia que Olive Partners pueda realizar recompras de acciones sin generar ninguna obligación para una oferta general, por eso pide el voto en contra de la propuesta 23 (la renuncia a las disposiciones de oferta obligatoria establecidas en la Regla 9 del Código de Adquisiciones). Recuerden que en la Junta de 2021, una propuesta recogió que Olive Partners pudiera aumentar su participación al 40,5433% sin verse obligada a lanzar una OPA… algo que no gustó al 17,89% de los accionistas, que votó en contra de dicha propuesta, pero que salió adelante.
ISS también aconseja el voto en contra de las reelecciones de Manolo Arroyo, vicepresidente mundial de marketing de The Coca-Cola Company, y de Mario Rotllant, primo político de Sol Daurella (es marido de su prima Carmen Daurella Aguilera) como miembros no independientes de la Comisión de Retribuciones de CCEP. Y es que ISS considera que los Comités de Retribuciones deben estar formados sólo por consejeros independientes. Por su parte, el directorio de CCEP y la presidenta del Comité de Remuneraciones, Christine Cross, defiende ambas reelecciones como adecuadas porque dicho Comité “está compuesto por una mayoría de consejeros no ejecutivos independientes, sin perjuicio de la presencia de los señores Arroyo y Rotllant”, representantes de los dos principales accionistas. Además, Cross añade que “es natural que estos accionistas quieran opinar sobre la remuneración de los altos ejecutivos y no hay conflicto de intereses con otros accionistas”. ¡Ole!