La farmacéutica Bayer emitió el pasado 4 de septiembre un comunicado de prensa en el que anuncia que "ha emprendido conversaciones con la representación legal de sus trabajadores en España para iniciar un plan social que afectará a 135 posiciones de su división farmacéutica. Actualmente, la organización cuenta en su conjunto con más de 2.400 profesionales en el país".
Traducido: la multinacional alemana va a realizar un ERE en España para despedir a 135 trabajadores, 13 de ellos de su planta en Lada (Asturias), donde produce cuatro principios activos, entre ellos el ácido acetilsalicílico (aspirinas).
"Esta medida es consecuencia de la situación del mercado en España, marcada por las dificultades de acceso a nuevos fármacos, y de la madurez de algunas de las marcas clave de la compañía", añade el laboratorio.
En declaraciones a El Economista, el sindicato UGT ha indicado que no va a aceptar el ERE.
En los seis primeros meses del año, Bayer rebajó su beneficio neto semestral un 90%, tras ganar 291 millones de euros, frente a los 2.993 millones que ganó hace un año, debido principalmente a un impacto negativo extraordinario de 2.921 millones que tuvo que afrontar. Por su parte, el resultado bruto de explotación (ebitda) se ha reducido un 18,6%, a 6.998 millones.