Ha sido durante su intervención en el Campus FAES 2024, organizado por la Fundación FAES, donde el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, ha recuperado una idea que ya planteó en el pasado y que le valió incontables críticas. 

Ha vuelto a considerar que los trabajadores "deberían recibir el sueldo bruto". Ha sido al hablar de la subida fiscal "impresionante" que ha supuesto para las empresas el alza de las cotizaciones sociales: "Es como si en una comunidad de vecinos se habla de los gastos y dicen, pero ahora pagan los del primero y del segundo, y los demás, no. Todo está funcionando así".

Garamendi ha insistido en que la subida ha disparado los costes empresariales."A mí me gustaría que se haga lo que la Seguridad Social hace con los autónomos, que todos los meses quita la cuota de autónomos de tal manera que yo sé lo que gano y lo que la Seguridad Social me quita o recupera. Nosotros pensamos que los trabajadores de este país deberían recibir el sueldo bruto y luego que el Estado le recupere".

Además, ha asegurado que los autónomos "tienen mayor conciencia fiscal porque hacen su propia gestión". "Cuando preguntas a alguien cuánto gana, solo piensa en lo que ha visto ingresado en el banco y se está olvidando de las pagas dobles, de las retenciones y de la Seguridad Social. Y si viera que casi es el doble diría bueno, ¿pero a dónde va este dinero?".

Nuevamente, las reacciones no se han hecho esperar, por ejemplo de la exministra Irene Montero.

Lo que no se esperaba Montero es que Ricardo Ferris no tendría problemas en responder: "Quizás esos trabajadores deberían conocer los 40.000 euros al mes que ganas tú y tu pandilla de 'inútilas' a cambio de decir sandeces".

La idea es simple, que al trabajador le llegue todo el dinero de la nómina y él, cuando realice el Impuesto sobre la Renta, también declara ante la Seguridad Social y ante Hacienda.

No es la primera vez que Garamendi carga contra las cuotas: en su día, aseguraba que las cotizaciones en España son un 30% superiores al resto de Europa, aunque nunca se ha atrevido a reclamar lo que es necesario para el mercado laboral del país: la supresión de las cuotas, sobre todo, cuando hablamos de los salarios más bajos.