Nuevo capítulo del culebrón INDRA-Murtra, esta vez con un tercer jugador en liza: Ebro Foods. Efectivamente, la compañía de alimentación (arroz SOS entre otras marcas) ha nombrado este lunes consejero independiente a Marc Murtra, presidente no ejecutivo de INDRA.
No es casual. El Estado posee un 10% del capital de Ebro y es el máximo accionista de INDRA, con un 18,7% de las acciones. En ambos casos a través de la SEPI. El nombramiento de Murtra como consejero independiente de Ebro, por tanto, responde a la intención del Gobierno de ratificar y apuntalar a Murtra en la Presidencia de INDRA.
Esta necesidad nace de la controversia que originó su nombramiento al frente de la empresa tecnológica, en sustitución de Fernando Abril-Martorell, quien contaba con el apoyo del Consejo de Administración, especialmente de los independientes, capitaneados por el vicepresidente, Alberto Terol. Murtra iba para presidente ejecutivo y se tuvo que conformar con presidente a secas.
La incorporación de Murtra al consejo de otra empresa participada por la SEPI no es una línea más en su CV, sino la confirmación de que cuenta con todo el apoyo del Gobierno para llevar las riendas de INDRA. Porque de eso se trata: de lograr que sea presidente ejecutivo de la compañía, a pesar del rechazo de los consejeros independientes. El mandato de Terol, por cierto, vence en junio.
La idea que se pretende transmitir desde La Moncloa es que el Gobierno está dispuesto a adjudicar a INDRA más contratos de Defensa, que es la división más rentable de la compañía. Pero eso será cuando Murtra pase a ser presidente ejecutivo.