La reciente Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) ha decidido que todos los países desarrollados paguen 100.000 millones de dólares para alcanzar la descarbonización de los países con menos recursos, informa Meteored.

“Si continuamos como estamos, las temperaturas seguirán aumentando, lo que traerá aún más inundaciones catastróficas, incendios forestales, clima extremo y destrucción de especies”, se ha dicho en COP26, recoge Armstrong Economics.

La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) pretende que las empresas deben ser transparentes sobre los riesgos y oportunidades que el cambio climático representa para sus negocios.

Esto es parte del Nuevo Orden Mundial

Además, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) quiere que los bancos centrales y los reguladores  -así como bancos, aseguradoras, inversores y otras empresas financieras-  se aseguren de que los sistemas financieros puedan resistir los impactos del cambio climático.

“Esto es parte del nuevo orden mundial. Esperan que todos los bancos centrales, instituciones financieras, inversores y básicamente todos los cambistas estén de acuerdo con su plan. Pero… “¿a dónde irá este dinero?”, se pregunta Armstrong Economics. “¿Lo arrojarán al sol con la esperanza de proporcionar algo de sombra?”, añade Armstrong Economics.

Un grupo sin fines de lucro llamado Climate Policy Initiative estima que las finanzas relacionadas con el clima ascendieron a 632.000 millones de dólares por año entre 2019 y 2020, lo que representa el 0,7% del PIB mundial, pero están pidiendo mucho más dinero. Incluso las naciones ricas no pueden permitirse gastar esta cantidad en un proyecto que fracasará desde el principio, denuncia Armstrong Economics.