HBO Max sigue los pasos de Netflix, Disney+ y Amazon Prime Video, pues ha anunciado que subirá precios en España y otros países europeos. Esto supone otra muestra más de cómo actúan estas plataformas de streaming, que juegan a pérdidas (pues todas nacieron con precios bajo coste, práctica que ha sido perseguida por todos los reguladores del competencia del mundo hasta hace poco) y una vez que se hacen con el dominio del mercado, cargándose a los rivales más pequeños, y logran un gran número de clientes, suben sus tarifas.

La plataforma de streaming propiedad de Warner Bros. Discovery se encarecerá antes de lo previsto y para todos los usuarios a la vez a partir del próximo 14 de julio: la suscripción estándar pasará de 8,99 euros mensuales a 9,99. Eso sí, los usuarios que se beneficiaban de la promoción del 50% “para siempre” sólo verán incrementada su tarifa de 4,49 euros al mes a 4,99. Lógicamente, HBO Max justifica el encarecimiento del precio por los mayores costes de adquisición, creación de contenido y desarrollo de productos, para poder “continuar invirtiendo en contenido de calidad y la experiencia del producto que nos esforzamos por brindar a nuestros clientes”. 

Ahora Amazon Prime Video se estaría planteando añadir un nuevo plan de suscripción más barato que incluiría publicidad y que lanzaría primero en EEUU y después en el resto de países

Recuerden que hace dos meses se conoció que HBO Max será sólo Max, pero al final no tendrá versión gratuita con anuncios... y subirá precios. Claro que el cambio de nombre llegó ya a EEUU, pero en España no se espera antes de 2024. Lo que sí se ha apresurado ha sido la subida de precios, que ya no será para los nuevos usuarios y después probablemente para los actuales, sino para todos a la vez. 

Un incremento de tarifas que ya se podido ver en otras muchas plataformas de streaming. Por ejemplo, la progre y blasfema Netflix ha agravado su crisis, pues ha empezado a perder usuarios en España... por el fin de las cuentas compartidas, o sea, por la subida de precios; y a esto suma el fracaso de su plan barato con anuncios. Asimismo, la progre en Disney también está sufriendo sangría de suscriptores y continúa teniendo pérdidas en streaming, lo que le ha llevado a plantearse unir plataformas (por ahora, fusionar Disney+ con Hulu en EEUU)... y subir precios. Por su parte, Amazon Prime (que incluye el servicio de streaming Amazon Prime Video) incrementó su precio desde el pasado 15 de septiembre en España: la tarifa anual pasó de 36 euros a 49,90 y la mensual de 3,99 euros a 4,99. Ahora Amazon Prime Video se estaría planteando añadir un nuevo plan de suscripción más barato que incluiría publicidad y que lanzaría primero en EEUU y después en el resto de países, según The Wall Street Journal. Además, el pasado octubre también Apple decidió incrementar los precios de algunas suscripciones. 

En resumen, seguimos en manos del oligopolio de las plataformas de contenidos...