El Consejo de Ministros de este martes ha autorizado a la SEPI para que compre un 10% adicional del capital de INDRA, de la que ya posee un 18%. La decisión es muy importante y tiene varias implicaciones.
La primera, interna, la toma de poder por parte de Marc Murtra, primer presidente no ejecutivo de la compañía, y no por voluntad propia sino por decisión de un Consejo de Administración dominado por consejeros independientes, con Alberto Terol al frente. Terol, vicepresidente y consejero coordinador, no renovará su mandato, que finaliza este verano, y dejará de ser un obstáculo para las pretensiones del Gobierno. Por ejemplo, para comprar la vasca ITP.
Saldrá Terol y, además, la SEPI, con el 28% del capital, tendrá derecho a un tercer consejero que, sumado al de la empresa SAPA, de la familia Aperribay, que compró el 5% que vendió Alba, dotará a la compañía de la “estabilidad accionarial” de la que habla el hecho relevante remitido a la CNMV.
¡Ah! y tras la renovación del consejo, Murtra tendrá mucho más fácil pasar a ser presidente ejecutivo, como lo fueron Javier Monzón y Fernando Abril-Martorell. Por cierto, el anuncio de la SEPI coincide con el nombramiento de Sergio Sánchez como nuevo responsable de comunicación corporativa de la compañía. Sánchez fue portavoz del CNI hasta su incorporación al área de seguridad corporativa de Telefónica.
La segunda derivada es externa y es muy bonita, porque nos remonta a septiembre de 2019, cuando el Gobierno eligió a INDRA como coordinador nacional del avión de combate europeo, en lugar de Airbus, candidata de alemanes y franceses. ¿Recuerdan la visita relámpago del CEO de Airbus, Gillaume Faury, a Pedro Sánchez, con bronca incluida?
Pues ahora, la decisión de ampliar hasta el 28% de INDRA “responde al renovado compromiso del Estado con una compañía que recientemente ha asumido retos de especial trascendencia para los intereses de nuestro país y de nuestros aliados más cercanos, siendo entre ellos especialmente destacable el Futuro Sistema Aéreo de Combate o FCAS (Future Combat Air System), del que forma parte España con INDRA como líder industrial de la participación española”, afirma el comunicado.
Y al fondo, aunque cada vez más cerca de la superficie, la compra de la vasca ITP, a la que Terol se opone junto con el resto de independientes. El PNV estará contento. Y Murtra también.