Comisiones al alza y menores provisiones frente a un margen de intereses en retroceso, es la tónica general de los bancos europeos durante los nueve primeros meses del año, incluido ING Group, que este jueves ha presentado sus resultados hasta septiembre.

La entidad ganó 3.832 millones de euros, un 118,1% más que en 2020, gracias al crecimiento del 15,7% de los ingresos por comisiones, que alcanzaron los 2.592 millones de euros, y a la caída del 93,1% de las provisiones, que no superaron los 170 millones. La parte más frágil de la cuenta de resultados, el margen de intereses, se estancó en los 10.241 millones de euros, una caída del 0,2% respecto al mismo periodo de 2020.

La filial española, por su parte, ha continuado creciendo en número de clientes: 4,2 millones, un 2% más que hace un año, gracias al tirón de la Cuenta Nómina, que ha sumado un 10,8% más de clientes, hasta los 2,7 millones. Pero no siempre tener más clientes implica ganar más dinero, como le sucedió al mismo ING en 2020: aumentó en 200.000 el número de clientes de la Cuenta Nómina, pero ganó un 54% menos que el año anterior.