Lamborghini, la marca italiana de superdeportivos que desde hace años pertenece al grupo automovilístico alemán Volkswagen, podría denunciar a Pedro Sánchez por daño reputacional, según Mediterráneo Digital. Y es que el presidente del Gobierno quiere “más transporte público y menos Lamborghinis”, como ha señalado hace unos días. Eso sí, a su querido Falcon que no se lo toquen.

El presidente del Gobierno se ha vuelto a lucir con sus palabras, en esta ocasión las que pronunció en el inicio del curso político que celebró en el Instituto Cervantes el miércoles 4. Toda una cortina de humo para que se le prestara más atención a él que a la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús (Marisu) Montero, hablaba en el Senado sobre el acuerdo entre PSC y ERC que supone una financiación singular para Cataluña. De hecho, la titular de las arcas públicas españolas no tuvo reparo en defender dicho acuerdo, y cambiar de opinión respecto a lo que decía meses atrás, presumiendo de que “es un acuerdo solidario”.

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Sánchez dio comienzo al curso político con más demagogia, si aún cabe, al anunciar un nuevo golpe fiscal a los ricos, pues el Gobierno “agravará fiscalmente a quienes tienen en el banco el suficiente dinero para vivir cien vidas”… es su forma de proteger “a las clases trabajadoras de un sistema extraordinariamente injusto”. Pero ojo, porque esto de “vivir cien vidas” y lo de “menos Lamborghinis” ha tenido mucho eco y repercusión, en especial en las redes sociales, y ha servido para que el presidente del Gobierno pueda ‘esconder’ que nos subirá los impuestos… otra vez… y no sólo a los ricos, porque incrementará el impuesto sobre la renta (eso sí, “para orientar el sistema productivo”) y subirá el IVA, pero no sólo para que retorne a donde estaba antes de las medidas que ha adoptado en los últimos tiempos.

Volvamos a Lamborghini, que estudia acciones legales contra Sánchez por daño reputacional. Y ojo, esto sucede en un momento delicado para su dueño, el grupo Volkswagen, que también es propietario de Seat (y por ende, de su marca premium Cupra), y que entre la marca insignia que da nombre y la filial española tiene dos fábricas en nuestro país (en Pamplona y en Martorell) que suman más de 16.500 empleados directos. Volkswagen se ha planteado, por primera vez en su historia, el cierre de plantas en Alemania… y ha señalado que le faltan pedidos equivalentes... ¡a dos fábricas! El grupo automovilístico alemán necesita reducir costes ante el freno del coche eléctrico y la crisis del sector de automoción, y por ahora, no hay ajustes a la vista para su planta de Pamplona, pero el presidente de Seat, Wayne Griffiths, ha advertido de posibles recortes de producción... si no se rebajan los aranceles a los coches eléctricos chinos… porque allí fabrican el Cupra Tavascan.

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Todo un escenario que parece que le da bastante igual a Sánchez… pues no ha renunciado a la demagogia en el inicio del curso político, sin importarle dañar la reputación de una marca que sólo vendió 46 turismos en España en 2023, lo que supuso el 0,0048% del total. Es más, entre 2022 y 2023, la cifra fue de 68 unidades, el 0,0038% del total de las matriculaciones de turismos; y en los ocho primeros meses de este año, la cifra ha sido de 34 turismos, el 0,005% del total. Ante todas estas cifras de ventas de Lamborghini, parece que el golpe fiscal a sus dueños tendrá poca repercusión en las arcas públicas. Y por cierto, hablando de propietarios, en las redes sociales, se recuerda el sueldo de algunos políticos socialistas, aunque no todos podrían comprarse el citado superdeportivo que tiene un toro de lidia en su logotipo porque se puede comprar a partir de 230.000 euros.

 

 

 

La historia de Lamborghini surge de la mano del italiano Ferruccio Lamborghini, que cuando acabó la II Guerra Mundial empezó a comprar vehículos al Ejército italiano para convertirlos en maquinaria agrícola, sobre todo, tractores… y tuvo éxito. Esto le llevó a poder comprar muchas propiedades y coches deportivos, pues admiraba a Enzo Ferrari, pero esto acabó por los problemas mecánicos de su Ferrari. De hecho, Ferruccio Lamborghini contó que “los Ferrari solamente me creaban problemas” y que “un día, ya harto de mandarlos al taller, llamé a Enzo para decirle que sus coches eran pura basura. Y me contestó que un fabricante de tractores no podía entender sus coches…”. A partir de ahí, el primero decidió fabricar automóviles deportivos e instalarse en Sant’Agata Bolognese, a pocos kilómetros de Maranello (la sede de Ferrari)… y también logró tener éxito, aunque tras el fundador, tuvo otros propietarios, y pese a exitosos modelos, llegó a estar al borde de la quiebra… y ahí es dónde apareció el grupo Volkswagen, que pasó a integrar la marca en su portfolio.

A Ferruccio Lamborghini le gustaba la tauromaquia, por eso eligió el toro de lidia para el logotipo por reflejar bravura y coraje, y el nombre de toros indultados para muchos de sus modelos. Ante las críticas de Sánchez también ha reaccionado el mundo de la tauromaquia, que también ha sido atacado desde el Gobierno en otras ocasiones (por ejemplo, impidiendo que los espectáculos taurinos formen parte del bono cultural que da a los jóvenes que cumplen 18 años).