Los españoles tienen 915.008 millones de euros en depósitos y cuentas corrientes, según Inverco, que recoge datos del Banco de España al cierre del mes de junio pasado. Es la cifra más alta desde que hay datos al respecto y no ha pasado desapercibida a los bancos, que se están pensando muy seriamente empezar a cobrar, no ya por los depósitos, sino por los saldos.

Hablamos, naturalmente, del cliente particular, porque cobrar a las empresas -al menos, a algunas- por sus depósitos, lo lleva practicando el sector desde hace meses. Y es que la política monetaria del BCE deja poco margen a la banca, que tiene que buscar ingresos hasta debajo de las piedras. Y, por si fuera poco, antes de marcharse, Mario Draghi les dio una vuelta de tuerca y subió del 0,4% al 0,5% lo que les cobra el BCE a las entidades por la liquidez que depositan en él. Fantástico.

La política monetaria del BCE deja poco margen a la banca, que tiene que buscar ingresos hasta debajo de las piedras

En definitiva, las entidades necesitan encontrar una solución y rápido. Por ejemplo, cobrar a las empresas por sus depósitos y/o aumentar las comisiones, tanto a empresas como a particulares, algo que comenzarán a hacer de una manera más intensa a partir de 2020. Pero no es suficiente: hay que empezar a cobrar por los saldos a partir de 100.001 euros, esto es, a partir del umbral que garantiza el FGD.

“Con la situación de los tipos de interés negativos -y hay la sensación de que estarán mucho tiempo- habrá que ir pensando en cargar el coste a los clientes”, afirmó el viernes el CEO de Banco Sabadell, Jaime Guardiola. “Va a ser inevitable”, agregó.

Y no solo por los depósitos, sino por los saldos a partir de 100.001 euros. El problema, para fortuna de los clientes, es que ninguna entidad quiere ser la primera en aplicar la medida y exponerse a una fuga masiva de clientes.

Somos el segundo país que más cobra por los depósitos a las empresas, solo por detrás de Luxemburgo 

“Hay un nivel a partir del cual nada va a cambiar. No se puede obligar a estos clientes (a los más vulnerables) a mover su dinero hacia productos más arriesgados”, afirmó el miércoles el presidente de la Federación Bancaria Europea y CEO de Unicredit, Jean Pierre Mustier, durante una mesa redonda celebrada en el Banco de España.

No se puede descartar nada. Hace no tantos años parecía imposible que la banca cobrara a las empresas por los depósitos, y actualmente, desde hace meses, es algo habitual. Es más, según los últimos datos del BCE, somos el segundo país que más cobra por los depósitos a las empresas (-0,09%), solo por detrás de Luxemburgo (-0,23%), muy por encima de la media europea (0,04%).