Bernard Arnault (73 años) tiene razones para estar contento, pues ha conseguido destronar a Musk y Bezos y se ha convertido en el hombre más rico del mundo según Forbes ¿El motivo? La caída en el precio de las acciones de Tesla, lo que ha hecho que Arnault suba en el escalafón, sin olvidar los grandes resultados del grupo de lujo francés Moët Hennessy Louis Vuitton (LVMH): ganando un 22% más, hasta los 6.532 millones de euros, hasta junio.
Y es que, a los buenos resultados del conglomerado multinacional francés líder en marcas de lujo y dueño de 76 firmas como Moët & Chandon, Dior, Loewe, Givenchy o Tiffany, hay que sumarle que el valor de las acciones de la empresa de vehículos eléctricos se ha reducido a más de la mitad este año, lo que se explica por la liquidación a raíz de la adquisición de Twitter por parte de Musk.
La familia Arnault supervisa su imperio de lujo y acumula una fortuna de 186.200 millones de dólares, según Forbes. Por lo que Musk, que se convirtió en el hombre más rico del mundo en septiembre de 2021, se queda con la medalla de plata y una riqueza de 181.300 millones, siendo el tercer puesto para el fundador de Amazon, Jeff Bezos.
Es durante un viaje a Nueva York cuando decide continuar por el camino del sector textil. Y es que, hablando con un taxista, Bernard le pregunta si sabe quién era el presidente de Francia, dato que desconocía el conductor, que sí sabía quién era el diseñador Christian Dior
El francés Arnault quizás es el más desconocido de los tres, no siempre se ha dedicado al mundo de la moda, el lujo y la cosmética. De hecho, sus padres tenían un negocio de construcción que el propio Bernard vendió por 40 millones de francos. Junto a su mujer continuó su vida en Estados Unidos donde se centró en el desarrollo del negocio inmobiliario en Florida. Más tarde regresó con su familia a Francia donde decidió reorientar sus negocios tras el crack de la bolsa de 1987. Entonces adquiere la empresa Financière Agacheel por el que toma el control del grupo Boussac, empresa francesa especializada en textiles, que era propietaria de Cristian Dior y de los grandes almacenes Le Bon Marché.
Es entonces cuando empieza su carrera en el sector textil y, según cuenta su historia, es durante un viaje a Nueva York cuando decide continuar este camino. Y es que, hablando con un taxista, Bernard le pregunta si sabe quién era el presidente de Francia, dato que desconocía el conductor, que sí sabía quién era el diseñador Christian Dior. Lo que le hizo llevar a cabo la adquisición de diferentes marcas de moda y belleza: Louis Vuitton, Kenzo, Moët & Chandon, Loewe, Bulgari, Tiffany, Givenchy, Dom Pérignon o Fendi. Bernard Arnault compra acciones de LVMH, formado por Moët Hennessy y Louis Vuitton, al año siguiente el grupo busca inversores y Arnault se queda con la participación más alta de la empresa, en julio de 1988, lanza una OPA y se convierte en accionista principal de LVMH.
Hay una frase de Arnault que parece pronosticar este cambio en las fortunas, siendo una empresa no tecnólogica la que le ha dado el primer puesto: el dueño de LVMH llegó a afirmar "¿Puedes decir que dentro de 20 años la gente seguirá usando el iPhone? Tal vez no. Tal vez tendríamos un nuevo producto o algo más innovador. Lo que puedo decir hoy es que, dentro de 20 años, estoy bastante convencido de que la gente seguirá bebiendo Dom Pérignon".