La Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) ha presentado el XVI Barómetro y las conclusiones son catastróficas.
Dos de cada tres autónomos creen que su actividad no mejorará en 2023 https://t.co/4mjJgvQ36t vía @ABCeconomia
— Lorenzo Amor (@lorenzoamor_ata) December 20, 2022
Dos de cada tres autónomos, el 66,6%, consideran que su negocio no evolucionará a mejor el próximo año, y tan solo el 3,5% prevé contratar nuevos trabajadores, frente a un 12,9% que ya alerta que tendrá que disminuir su plantilla si la situación continúa como hasta ahora.
Y conforme se van viendo los datos, la cosa empeora: solo el 25,8% de los autónomos considera que su negocio haya crecido a lo largo de 2022, el 37,8% afirma que, no solo es que no haya crecido, sino que su actividad ha sufrido un descanso y el 36,4% asegura que su actividad se ha mantenido igual que en 2021.
Solo uno de casa cinco se muestran optimismas, es decir, unicamente el 20,3% cree que su negocio crecerá el próximo año, frente al 66,6% que no opinan que la cosa irá a mejor y un 35,2% asumen que su actividad decrecerá.
Además, siete de cada diez autónomos destacan que la tendencia de la economía será negativa, o lo que es lo mismo, el 46,5% ve la tendencia negativa y el 25,3 una tendencia muy negativa.
Se comprueba con este barómetro que el 8,7% de los autónomos ha aumentado su plantilla a lo largo de 2022, un 38,9% afirma que ha mantenido la plantilla y el 9,2% se han visto obligados a reducirla.
Por si fuera poco, tenemos la morosidad, tanto pública como privada, que ha sido y es uno de los principales problema, en lo que va de año, el 39,7% de los autónomos ha sufrido morosidad. El 7,4% de ellos por parte solo de entidades públicas, el 9,8% tanto públicas como privadas y el 22,5% por parte de otras empresas privadas
Y es que el 26% de los autónomos consideran que su facturación durante el 2022 en relación con el 2021 se ha visto disminuida un 20%. Y mientras la facturación disminuye, los gastos crecen, el 95,2% de los autónomos afirman que sus gastos han aumentado en 2022.
Por si fuera poco, tenemos la morosidad, tanto pública como privada, que ha sido y es uno de los principales problema, en lo que va de año, el 39,7% de los autónomos ha sufrido morosidad. El 7,4% de ellos por parte solo de entidades públicas, el 9,8% tanto públicas como privadas y el 22,5% por parte de otras empresas privadas.
Y de postre, ocho de cada diez autónomos, el 79,5%, afirma no haber recibido ningún tipo de ayuda por parte de las administraciones públicas, y de los que la recibieron la mayoría declaran haberla obtenido de la comunidad autónoma. El 4,9% afirma haber accedido al cese de actividad, el 3,1% ha accedido a los ERTE, un 5,6% señala haber recibido otras ayudas estatales y el 3,1% de otras administraciones.
Estos datos se publican unos días antes de que comience la agonía del autónomo, el próximo 1 de enero. El sepulturero Escrivá, pondrá en marcha su nuevo sistema de cotización a la seguridad social de estos trabajadores, que supondrá la muerte del cuentapropismo.