Como se sabe, la Unión Europea exige a España dos condiciones para poder recibir los fondos europeos: reforma laboral y reforma de las pensiones.
En cuanto a la reforma laboral, se busca que reduzca la temporalidad. En ese sentido, el Gobierno quiere aprobar una nueva ley que permita reducir a tres los tipos de contrato.
En ese sentido, en lo que respecta a la temporalidad, el Gobierno ha propuesto en la mesa de diálogo social que la contratación temporal quede ligada a causas muy concretas y que los contratos indefinidos sean lo ordinario a la hora de incorporar trabajadores. La idea es que la contratación temporal quede justificada siempre que sea ocasional y puntual, sin superar los tres meses. El número de trabajadores que se podrán incorporar a través de este contrato dependerá del tamaño de la empresa, recoge elderecho.com.
Para las campañas cíclicas, como rebajas o Navidad en el caso del comercio, el Gobierno quiere que se recurra al contrato fijo discontinuo, dado que esos puestos de trabajo se repiten periódicamente.
El Ejecutivo plantea además que una vacante laboral que se cubra durante más de cinco meses con distintos empleados temporales pase a considerarse un puesto estructural, de forma que la empresa tenga que hacer un contrato indefinido. En el caso de los contratos de sustitución, se propone que éstos deban acomodarse al plazo en el que vuelva la persona a la que se cubre.
El Gobierno también negocia con los agentes sociales un nuevo texto sobre el 'Mecanismo RED de Flexibilidad y Estabilización del Empleo', los nuevos ERTE, añade elderecho.com.
Europa también exige una reforma de las pensiones que cuente con el máximo acuerdo. Ahí, en concreto, Europa exige la activación del fondo público de pensiones y la implantación del sistema de cotización por ingresos reales para los trabajadores autónomos. Además, Europa pide a España acuerdo sobre el ajuste de años cotizados para el cálculo de la pensión de jubilación, la senda de ajuste de las bases máximas de jubilación y el reemplazo del factor de sostenibilidad por el mecanismo de equidad intergeneracional, recoge El Economista.
Por cierto que el actual ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá, es partidario de retrasar paulatinamente la edad de jubilación , tal y como pide Europa. Pero los comunistas socios de su Gobierno, los podemitas, no están por la labor.
Paradójicamente, uno de los pactos con ERC y EH Bildu para aprobar los Presupuestos de 2022 es el adelanto de la edad de jubilación de los Mossos d’Esquadra y de los policías forales de Navarra: podrán jubilarse a los 60 años. Equiparándose así al régimen que se aplica a la Ertzaintza en el País Vasco. Cosa que soliviantó ayer a los principales sindicatos de Policía y agrupaciones de Guardia Civil, informa El Mundo.