En juego está la cobertura sanitaria a más de 1,5 millones de funcionarios, que no es poca cosa y que ahora, tras la última subida aprobada en el Consejo de Ministros, está más que nunca en entredicho. Porque la mejora de la prima del 17,12% -la anterior propuesta era del 14%- está muy lejos del 40% exigido por las aseguradoras.
Aun así, el Gobierno no ha querido dejar escapar la oportunidad para utilizar uno de sus argumentos preferidos: el 17,12% supone “la mayor subida de la serie histórica”. “Estamos hablando de 2.681 millones de euros, que son 300 millones más que el anterior”, afirmó la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
La propuesta asciende a 1.337 millones en 2025 y 1.344 millones en 2026. Da lo mismo. Puede ser la mayor subida de la historia, pero sigue siendo insuficiente, tanto para las aseguradoras como para la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF). “Nos tememos que va a tener consecuencias en la calidad en la asistencia que reciben los mutualistas”, afirmó el sindicato en un comunicado, que no descarta movilizaciones. “No vamos a dejar que el modelo Muface muera por inanición”, señaló el sindicato.
Pero vista la actitud de Moncloa, ¿no será que en realidad quiera liquidar el modelo, como pretendió Podemos en 2021? Ese año, los comunistas de Unidas Podemos, que rechazan cualquier propuesta que huela a sector privado, presentaron una proposición no de ley en el Congreso de los Diputados, para que los nuevos funcionarios sólo pudieran ser atendidos en la sanidad pública, lo que llevaría a la desaparición del modelo Muface.