La aseguradora DKV también dice no, tras la negativa de Adeslas, líder en el sector, a aceptar las condiciones de pago del Gobierno, pues considera que no cube gastos. DKV ya había manifestado que las condiciones del Ejecutivo Sánchez eran una ruina y ahora ratifica la negativa de Adeslas. Seguirá con sus clientes privados.
En España vivimos un nuevo espejismo producto de la propaganda: mientras la clase política presume de una inmejorable sanidad estatal pero, miren por dónde, todo español que puede se apunta a un seguro privado.
Encima, el Gobierno está dividido entre extremistas del PSOE y ultras de Sumar. Los extremistas del PSOE quieren reducir la aportación al sistema Muface y que las aseguradas traguen. Los comunistas de Sumar, con Mónica García, ministra de Sanidad, a la cabeza, simplemente quieren liquidar Muface y hacer que todos los funcionarios se vayan a la Seguridad Social. El problema está servido: la sanidad pública no puede absorber tantos nuevos pacientes sin que las listas de espera se disparen hasta no se sabe dónde.
Curiosamente, este sería el momento en el que Vox hiciese valer su idea del cheque sanitario, pues es el único partido que lo llevaba en su programa electoral.
El cheque sanitario, al igual que el cheque escolar, significa que el Estado otorgaría un cheque a cada ciudadano para que cada cual escoja si quiere ser atendido en la sanidad pública o en la privada. Máxima libertad.
Ese cheque sanitario, al igual que ocurre con el bono o cheque escolar en la enseñanza, cubriría toda la atención médica del paciente.
El cheque es un sistema más libre, sin duda, tanto en educación como en sanidad, pero ni a los socialistas ni a los comunistas les hace mucha gracia: demasiada libertad.
El PP, que es socialdemocracia de derechas, tampoco está por la labor. Lo que sorprende es que los de Abascal no hagan valer su propuesta electoral. Sin duda este es el momento pero, al parecer, don Santiago es el primero que no se ha leído su propio programa electoral.
En cualquier caso lo que está en juego con el desastre Muface es que la calidad del servicio sanitario en España aún caiga más, sobre todo en esa clave de la atención sanitaria que son las listas de espera.