Más aspectos confirman el fin del modelo de Netflix, ahora sus resultados del tercer trimestre. Y es que a pesar de elevar ingresos al volver a sumar suscriptores, baja en resultado bruto de explotación (Ebitda) y beneficio neto… y ojo, porque prevé ganar sólo 163 millones de dólares (166 millones de euros al tipo de cambio actual) en el cuarto trimestre… por culpa de la fortaleza del dólar y la desaceleración de la economía. Es decir, sigue sin hacer la más mínima autocrítica.
La blasfema plataforma de streaming que dirigen Reed Hastings y Ted Sarandos ha batido previsiones de abonados e ingresos entre julio y septiembre, y su cotización aplaudió con una subida del 15% en el cierre prolongado de Wall Street, aunque insuficiente para recuperarse de la fuerte depreciación bursátil que acumula en el último año (-62%). En concreto, ha sumado 2,41 millones de nuevos suscriptores, frente a los 1,09 millones previstos por los analistas, y tras haber sufrido la mayor pérdida de abonados en sus 25 años de historia en el segundo trimestre (-970.000) y perder otros 200.000 entre enero y marzo. Netflix ha vuelto a crecer en suscriptores sobre todo por el fuerte alza en Asia-Pacífico (+1,43 millones), mientras que en EEUU y Canadá sólo ha logrado 110.000 nuevos; en Europa, Oriente Próximo y África, 560.000; y en Hispanoamérica, 320.000.
Ha vuelto a crecer en suscriptores sobre todo por el fuerte alza en Asia-Pacífico (+1,43 millones), mientras que en EEUU y Canadá sólo ha logrado 110.000 nuevos; en Europa, Oriente Próximo y África, 560.000; y en Hispanoamérica, 320.000
Netflix ha cerrado septiembre con 223,1 millones de abonados, 9,5 millones más que hace un año, y espera atraer a otros 4,5 millones en el cuarto trimestre, alcanzando un total de 227,59 millones. Todo ello en un entorno de creciente competencia en el sector del streaming (en el que también ha entrado Walmart de la mano de Paramount) y en el que Netflix no es la única plataforma que ha anunciado un plan barato con anuncios (también lo hará la progre The Walt Disney Company en Disney+ y Hulu; y Warner Bros Discovery con la fusión de HBO Max y Disconvery+). El plan barato con publicidad de Netflix se pondrá en marcha en 12 países (en España el próximo 10 de noviembre a 5,49 euros al mes) y esa es la razón que alude para dejar de dar estimaciones sobre nuevos abonados porque estos pasarán a ser solo “un componente del crecimiento de nuestros ingresos”. ¡Qué cara más dura! Y encima, como Google, se convertirá en enemigo de la prensa libre al robarles publicidad, su fuente principal de ingresos.
En facturación, Netflix también ha batido los pronósticos en el tercer trimestre: ha obtenido 8.047 millones de euros, un 5,9% más que hace un año. “Después de un primer semestre desafiante, creemos que estamos en el camino para volver a acelerar el crecimiento”, ha señalado la plataforma, pero las cifras de ganancias no reflejan tanto optimismo. El beneficio neto se ha situado en 1.419 millones, un 3,5% inferior al de hace un año; y el Ebitda ajustado ha continuado en descenso: ha pasado de 2.205 millones entre enero y marzo a 1.845 millones en el segundo trimestre y a 1.802 millones entre julio y septiembre. Y ojo, porque en el cuarto trimestre prevé obtener un beneficio neto de sólo 166 millones, frente a los 618 millones que ganó en el mismo periodo del año pasado, por la fortaleza del dólar y la desaceleración de la economía. ¿Y los contenidos no tendrán también algo que ver? Recuerden que no hace ascos a contenidos cristófobos (La primera tentación de Cristo o Paradise Police son algunos ejemplos), al uso excesivo del sexo (como se puede ver en 365 días, Halston, Los Bridgerton -que acaba de estrenar su segunda temporada- o Élite, la sexualización de niñas o la perversión en dibujos animados) o al uso de la violencia (El juego del calamar o Dahmer), entre otras cosas.También financia abortos y le han salido críticos contra su agenda LGTB y el adoctrinamiento de niños.
En el cuarto trimestre prevé obtener un beneficio neto de sólo 166 millones, frente a los 618 millones que ganó en el mismo periodo del año pasado, por la fortaleza del dólar y la desaceleración de la economía. ¿Y los contenidos no tendrán también algo que ver?
En el conjunto de los nueve primeros meses, Netflix ha obtenido un beneficio neto de 4.505 millones, un 1,6% menos que hace un año, pese a elevar sus ingresos un 8%, hasta 24.128 millones. Eso sí, la fortaleza del dólar también tendrá un impacto negativo en la facturación de unos 1.015 millones.
Y no hay que olvidar el tema de la deuda. Entre julio y septiembre, la deuda bruta de Netflix ha ascendido a unos 14.256 millones, dentro del rango estimado, y la deuda neta, a unos 8.044,5 millones. Por su parte, la deuda a largo plazo ha tenido un ligero descenso, pasando de 14.961,8 millones al cierre de 2021 a 14.142 millones.