A 1 de marzo, la nómina mensual de las prestaciones contributivas de la Seguridad Social ascendió a 10.781,75 millones de euros. El incremento interanual se sitúa en el 4,9%, un nuevo récord, informa el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.

La pensión media del sistema asciende a 1.086,52 euros mensuales. Esta cuantía, que comprende las distintas clases de pensión (jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y en favor de familiares), ha aumentado en el último año un 3,7% en términos homogéneos.

La pensión media de jubilación del sistema, por su parte, se sitúa en 1.250,37 euros. Por regímenes, la pensión media de jubilación procedente del Régimen General es de 1.400,37 euros al mes, mientras que la más baja la registra el Régimen de Autónomos, de 832,44 euros/mes. En la Minería del Carbón, la media de jubilación mensual se sitúa en 2.437,75 euros y es de 1.388,04 euros en el Régimen del Mar.

La cuantía de las nuevas altas de jubilación ascendió en el mes de febrero de 2022, último dato disponible, a 1.486,71 euros mensuales.

Por su parte, la pensión media de viudedad en vigor en febrero es de 776,00 euros al mes.

El 72,30% de la nómina ordinaria de las pensiones, 7.795,57 millones de euros, se destinan al abono de las pensiones de jubilación. A pensiones de viudedad se dedican 1.823,52 millones de euros, mientras que la nómina de las prestaciones por incapacidad permanente, por su parte, se sitúa en 985,08 millones de euros, la de orfandad supone 149,52 millones de euros y las prestaciones en favor de familiares, 28,06 millones.

De las 9.923.175 pensiones contributivas abonadas, un 1,09% más que en el mismo mes de 2021, 6.234.609 son de jubilación, 2.349.915 de viudedad, 952.160 de incapacidad permanente, 342.215 de orfandad y 44.276 en favor de familiares.

El gasto en pensiones se mantiene en el 12% del producto interior bruto (PIB) en el este tercer mes de 2022.

Lo cierto es que mientras la nómina mensual del sistema público de pensiones sigue aumentando de manera alarmante, el Gobierno ataca a los planes de pensiones individuales privados, que sirven como complemento a las pensiones públicas. Y los planes de ahorro colectivos puestos en marcha por el ministro José Luis Escrivá no nacen con los incentivos necesarios para su correcto desarrollo, según la patronal Unespa.