Ha sido durante el X Foro Hispano-Alemán que se celebra en Berlín y que este martes ha contado con la asistencia del rey Felipe VI. Ignacio S. Galán y José María Álvarez-Pallete han coincidido en exigir seguridad jurídica y unas normas de competencia europeas que se asemejen a las de EEUU.
Las peticiones tienen su enjundia, sobre todo la segunda. Lo hemos dicho alguna vez y Pallete lo repite siempre que puede: mientras en la UE hay más de 200 operadores de telecomunicaciones, en EEUU hay solo dos o tres. Hace tiempo que Europa ha dejado de estar en el mapa de los grandes inversores en telecomunicaciones, frente a regiones como Singapur o la propia EEUU.
Es preciso reformular la legislación europea sobre competencia. No es lógico, por ejemplo, que se tome como referencia el mercado nacional, el de cada país, mientras EEUU se concibe como un único mercado. Mientras Bruselas no tome cartas en el asunto y vele por un auténtico mercado único europeo y no por 27 mercados nacionales, el sector de las telecomunicaciones no tendrá ninguna oportunidad frente a los gigantes norteamericanos y asiáticos. Y quedarse rezagado en esta era digital marcará el futuro económico de Europa y, por tanto, de España.
“De las cincuenta mayores compañías mundiales del sector TIC por capitalización bursátil solo cinco son europeas, y suponen menos del cinco por ciento del valor total”, recordó Pallete.
“Hay que progresar en proyectos europeos como los relativos a la inteligencia artificial, la seguridad, la defensa, la información, las comunicaciones, con la fibra inteligente, el 5G y el edge computing a la cabeza. Las telecomunicaciones desempeñan un papel clave para la autonomía estratégica de Europa, porque son la puerta al futuro. Por eso es tan importante que haya un sector de las telecomunicaciones robusto y sostenible”, afirmó.
Esa misma unión es la que ha exigido el presidente de Iberdrola para superar la crisis energética en el Viejo Continente, provocada por el gas, como se ha encargado de recordar Galán. Es preciso avanzar hacia la independencia energética mediante la electrificación de la economía. Lo dice el presidente de Iberdrola.