El impuestazo energético sigue dando que hablar, pero todo va en la línea del paripé que ya les hemos venido contando en los últimos días. En el Pleno del Congreso de los Diputados de este jueves (el último de este año), Junts, PNV, PP y Vox han tumbado dicho gravamen (que nació como extraordinario, no lo olviden), pero María Jesús Montero hará el gran paripé hasta el final. La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda llevará un decreto que incluirá su prórroga (tal y como prometió a ERC, EH Bildu y BNG,... y también para contentar a Unidas Podemos y Sumar) a la Cámara Baja... pero este no saldrá adelante por falta de apoyo parlamentario.
Los partidos nacionalistas catalanes y vascos de derechas se han unido a PP y Vox al aprobar la enmienda 54 (presentada por los de Alberto Núñez Feijóo) incluida en el proyecto de ley por el que se crea un nuevo impuesto mínimo para las multinacionales (y que incluye cierta reforma fiscal). Tal y como se preveía, los de Carles Puigdemont han cumplido su amenaza y al final han votado en el mismo sentido que en la tarde del pasado martes en el Senado.
Nogueras (Junts) se ha preguntado si “¿habrá algún partido catalán en el Congreso que votará a favor de un impuesto que no grava a las grandes eléctricas españolas, que quita competencias a la Generalitat y pone en riesgo las inversiones?”. La respuesta ha llegado horas después, porque ERC ha votado en contra de la enmienda 54... y por tanto, a favor de mantener el impuestazo
En la mañana de este jueves, antes de la votación en el Pleno del Congreso, en una entrevista en TV3, Miriam Nogueras, portavoz de Junts en el Congreso, ha referido que el impuestazo es un “impuesto fake” con el que algunos partidos pretenden engañar a la gente y que “no votaremos a favor de ninguna medida que ponga en riesgo las inversiones en Cataluña”. Es más, se ha preguntado si “¿habrá algún partido catalán en el Congreso que votará a favor de un impuesto que no grava a las grandes eléctricas españolas, que quita competencias a la Generalitat y pone en riesgo las inversiones?”. La respuesta ha llegado horas después, porque ERC ha votado en contra de la enmienda 54 (que incluye la supresión definitiva del impuestazo). Los de Oriol Junqueras y que tienen como portavoz en la Cámara Baja a Gabriel Rufián deberían recordar que en las últimas elecciones al Parlamento de Cataluña que se celebraron el pasado 12 de mayo, ganó el PSC (42 escaños), seguido de Junts (35), y tuvieron que conformarse con la tercera posición (20).
Por su parte, el portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, ha tenido un mensaje para su homóloga de Unidas Podemos: “Por mucho que chille la señora Belarra las cosas no van a cambiar”. Unas palabras con las que aludía a que la formación morada no tiene la mayoría, sino sólo cuatro diputados, y ya ni siquiera forma parte del Gobierno Sánchez.
El Gobierno Sánchez tendrá excusa ante muchos de sus socios de que ha intentado prorrogar dicho gravamen, pero al final no ha logrado que saliera adelante... y podrá echar la culpa, sobre todo, a Junts y PNV, partidos nacionalistas de derecha
Tras aprobarse la citada enmienda (que incluye la supresión definitiva del impuestazo), Marisu Montero llevará el gran paripé hasta el final. La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda lo hará con un real decreto ley que llevará al Consejo de Ministros antes de fin de año (no olviden que el próximo 23 será el último que se celebre en 2024). “Algunos se irán a Navidad con un titular fantástico que durará lo que durará hasta que llegue la votación al Congreso”, ha subrayado Nogueras en TV3. Y es que más adelante, Marisu Montero tendrá que convalidar dicho real decreto ley en la Cámara Baja... donde no obtendrá los apoyos necesarios... y no podrá aprobarlo. En resumen, no habrá impuestazo en 2025. Eso sí, el Gobierno Sánchez tendrá excusa ante muchos de sus socios de que ha intentado prorrogar dicho gravamen, pero al final no ha logrado que saliera adelante... y podrá echar la culpa, sobre todo, a Junts y PNV, partidos nacionalistas de derechas.
No habrá impuestazo energético y saldrá adelante gran parte de la reforma fiscal aprobada hace unas semanas, eso sí, ya no se ve tan claro que el Gobierno esté “más cerca” de aprobar los Presupuestos de 2025, como en aquel momento aseguró Marisu Montero. Por cierto, el IVA de los yogures bajará del 10% al 4%. Asimismo, parece bastante claro que habrá subida del impuesto al diésel para equipararlo con el de la gasolina, algo que sí apoyan PNV y Junts. Eso sí, aún queda la duda de qué pasará con el impuesto del 7% a la producción eléctrica, que aporta unos 1.100 millones de euros a las arcas públicas cada año. Recuerden que PP y Junts acordaron suspenderlo, pero el Gobierno Sánchez podría intentar sacarlo adelante... como un gesto hacia los partidos de izquierda y el progresismo.
Al hilo de la reforma fiscal, Antonio Garamendi ha referido que “lo que se está haciendo en España con la presión fiscal no se está haciendo muy bien. No sólo en el espacio de las energéticas, cuando estamos hablando del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (imposible de cumplir, por cierto) a 2030 con casi 300.000 millones de euros en inversión”, pues por muchos fondos europeos que vengan, “que serán 30.000 millones, nos faltan 270.000-260.000 millones”. “Y resulta que la inversión privada la estamos castigando con impuestos a la carta a las eléctricas, a la banca”, ha añadido, aludiendo a que sobre este último acaba de avisar el BCE de que no va en la buena dirección. Además, el vicepresidente del BCE, el exministro Luis de Guindos, ha apuntado en una entrevista en RNE que puede afectar a la solvencia de los bancos y a la concesión de créditos.
“No podemos compartir la dinámica, que no tiene fin, de esta subida a la carta... de impuestos que van a perjudicar la confianza para la inversión, que es la clave para este país”, subraya Antonio Garamendi, presidente de la CEOE
El presidente de la CEOE ha explicado que sobre la presión fiscal a las empresas, “ya se está anunciando más cotizaciones sociales, eso es un coste... pero si la Seguridad Social española estuviera a la par de la europea que nadie dude que esa masa salarial podría ir a los salarios”. “Nos suben los salarios, nos suben la Seguridad Social, nos quitan las horas, y eso son cargas que las empresas, especialmente las más pequeñas, no pueden asumir”, ha destacado. Asimismo ha recordado que el Índice de Competitividad Fiscal de Tax Foundation, presentado por el Instituto de Estudios Económicos (IEE), refirió que la presión fiscal en Europa es mayor que en España si dividimos lo que se recauda por el número de españoles, pero si se compara lo que se recauda con los españoles que pagamos los impuestos la presión fiscal es mucho más alta. “Pedimos que se vaya a por la gente que no paga (de hecho, ayer se conoció un informe de la Comisión Europea que apuntaba que España dejó de recaudar 4.443 millones por fraude, evasión y elusión del IVA, quiebras no fraudulentas o errores de cálculo en 2022) y pagar todos adecuadamente”. “No podemos compartir la dinámica, que no tiene fin, de esta subida a la carta... de impuestos que van a perjudicar la confianza para la inversión, que es la clave para este país”, ha insistido el presidente de la patronal empresarial.
Y por cierto, ante tanto señalamiento de Unidas Podemos (sobre todo, por parte de Ione Belarra e Irene Montero) y quejas de Sumar (especialmente, del diputado Carlos Martín), cabe destacar que Repsol ha recibido el sello Fair Tax Mark, que otorga la organización Fair Tax Foundation. Dicho sello avala su gran contribución fiscal en los países en los que opera.