La multinacional holandesa Philips perdió 171 millones de euros hasta junio, frente a ganancias netas de 192 millones de euros del mismo periodo de un año antes, según informó la compañía.

Las ventas supusieron 8.095 millones de euros, un 0,5% más que un año antes, y el beneficio antes de impuestos ajustado (Ebitda) llegó a los 948 millones, un 29% menos.

El consejero delegado, Frans van Houten, ha explicado: "El impacto de los bloqueos por el Covid-19 afectó significativamente nuestro negocio en China, donde las ventas comparables y la entrada de pedidos disminuyeron casi un 30% en el trimestre. La producción en varias de nuestras fábricas, así como en las de nuestros proveedores en China, se suspendió durante dos meses, lo que exacerbó la cadena de suministro global y los desafíos de costes".

Y ha añadido: “El impacto positivo de estas acciones, junto con la solidez de nuestra cartera de pedidos y la mejora en el suministro de componentes, me da confianza en que reanudaremos el crecimiento a partir del tercer trimestre, lo que resultará en un crecimiento de ventas comparable del 6-9 % y una mayor rentabilidad en la segunda mitad del año. Para todo el año 2022, esperamos generar un crecimiento de ventas comparable del 1-3% y un margen Ebita ajustado de alrededor del 10%”.