El pasado día 13, en Consejo de Ministros extraordinario, se aprobó el tope ibérico al precio del gas que se usa para generar electricidad, mostrando la demagogia populista de Teresa Ribera. Sin embargo, ahora el tema está más cerca del pitorreo que de la realidad: la vicepresidenta ecológica habla de “incertidumbre” para calcular la rebaja exacta del precio de la luz que supondrá,... la cual ya no será del 30% previsto en un principio, sino de entre un 15% y un 20%. ¡Ole!
O sea, que ya no habrá luz tan barata como se decía hoy, pero tampoco mañana... porque con dicho tope ibérico se crea un nuevo déficit de tarifa... que pagarán los clientes eléctricos durante años y con intereses, porque es una deuda financiera. Además, conviene recordar que aún seguimos pagando el elevado déficit de tarifa que generó José Luis Rodríguez Zapatero con sus generosas primas (subvenciones) a las renovables, que llegó a casi 30.000 millones de euros y que al cierre de 2021 había bajado a 12.182 millones en 2021.
Conviene subrayar que Bruselas aún no ha mandado su ‘ok’ definitivo al tope ibérico. En el citado Consejo de Ministros extraordinario, la propia ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico habló de que podría tardar “una semana o dos, diez días...”. El tiempo va pasando y no ha habido novedades, pero recientemente, Ribera ha destacado: “Creo que va a ir muy rápido [...] Estoy segura de que irá en plazo”. Veremos.
La Comisión Europea ha preautorizado el tope ibérico al gas a cambio de una reforma de la tarifa regulada. Se apunta a que sería en línea con la que hay en Portugal, donde se fijaría el precio teniendo en cuenta las subastas de cada hora del día anterior y también otras a medio plazo (mensual, trimestral o anual)
Sin embargo, no todos son tan optimistas. Las comercializadoras aseguran que no podrán trasladar el descuento del tope ibérico a sus clientes, al menos, hasta dentro de un plazo de dos meses, según El Economista. ¿Dónde queda aquello de que los clientes lo iban a notar ya en su factura de mayo? Parece que bastante lejos. En el citado Consejo de Ministros extraordinario, Ribera defendió que el tope ibérico supondrá “una mejora inmediata para el 37% de los consumidores domésticos y el 70% de los industriales”, pero parece que no va a ser tan inmediata. Además, añadió que empezará siéndolo para los de la tarifa regulada, pero se podrían sumar también los clientes del mercado libre... cuando renueven sus contratos.
Y por cierto, no hay que olvidar que la Comisión Europea ha preautorizado el tope ibérico al gas a cambio de una reforma de la tarifa regulada. Se apunta a que sería en línea con la que hay en Portugal, donde se fijaría el precio teniendo en cuenta las subastas de cada hora del día anterior y también otras a medio plazo (mensual, trimestral o anual). Claro que teniendo en cuenta cómo van las cosas en el tema del tope ibérico, parece que habrá que tener paciencia, y además, debería estar listo para octubre de 2023,... y es que las cosas de palacio van despacio.
Por último y en relación a otro tema, a Ribera parece que se le da muy bien gastar el dinero de todos los españoles: se gastará siete millones en crear otros dos entes públicos con el argumento de luchar contra la despoblación, pues el reto demográfico es la otra materia de su cartera, según ABC. Además, de los 54 millones que se habían reservado este año contra la despoblación, sólo 3,4 millones son para empresas... y si no se ayuda a que sigan en esos lugares, es probable que se acaben yendo.